Los Capitanes conmueven, duermen, y salvan el desastre ante Fuerza Regia
La quinteta de Ramón Díaz rozó la perfección en los primeros tres cuartos. Los campeones de la LNBP despertaron en el último periodo y quedaron a dos puntos de la hazaña.
El nuevo ‘clásico’ de la LNBP validó los pergaminos. La enardecida rivalidad, combustible refinado de la Liga SiSNova, fue una melodía ambiental con final de heavy metal. Del 70-48 al 88-86, el pánico de la afición local como música de fondo, la tensión que se podía cortar con el raspar de la pelota en las redes. Si fue un aperitivo de lo que vendrá después, de mañana y febrero, fue una delicia. Como los 20 puntos de Daniel Girón, máximo anotador, y el nuevo doble-doble de Joel James (17+12).
Un ciclónico vendaval de 9-0, con depósitos de James y un triple de Rodriguez, madrugó a Fuerza Regia. La artillería de Cubillán y Bejarano encarrillaron de vuelta los vagones de la visita, pero Daniel Girón (ocho puntos en el primer cuarto) siempre soluciona cualquier imprevisto, aunque no sea jamás la primera llamada. Los esmeros de un cuasi heroico David Huertas, tiro medio y penetración hasta el aro, obtuvieron réplica en los danzones de Oglivie ante Fuller y Anosike. Con la elegancia de un cisne al preparar su vuelo, y la estrategia colocación de una tienda de autoservicio, el panameño hizo suya la pintura (17 y 66.7% de campo). Y Girón, aún con el tobillo maltrecho, siguió ejerciendo de ‘Rigo’ a Mendoza (14+2 y 100%).
Un pick&roll lanzado por Orlando Méndez y coronado por Joel abrió una segunda mitad que lucía irrisoria (50-31 a favor de Capitanes). La pareja repitió la fórmula acto seguido, con pase despistado, estilo Nash, Méndez. Después, Andriassi culminó una jugada diseñada por Popovich, con rotación sobre el perímetro, cuatro pases extra y un triple en la esquina. Baloncesto de autor con inspiración sanantonina. La salva de Andriassi rompió la salubre barrera de los 20 puntos de brecha (70-48). Con agresividad y fuego, los Capitanes redujeron a cenizas todas las virtudes de los proclamados monarcas de la LNBP. Sin triple, sin Anosike, sin Glynn, sin la batuta de Mojica, ‘La Fuerza’ fue antónimo. Hasta entonces.
Con Huertas como solista (23+2, 66% de doble), el malherido campeón naufragó entre el oleaje y los vientos que soplaban desde los botes de Méndez. Solo Cubillán (5/9 triples) exhibió propiedades. El resoplido para tomar aire coincidió con la mejor forma de Fuerza Regia en la noche, que redujo el déficit a nueve puntos. A siete. A cinco. El triple hardenezco de Mojica. El layup de Huertas entre el terror, el griterío, y el aire enrarecido que vició al Juan de la Barrera. Los Capitanes se asomaron al abismo, pero los libres de Girón apagaron las alarmas. A los Capitanes les sobraron ocho minutos y Fuerza Regia le faltó uno.