Un Real Madrid sin triple dejó ir la final de la Euroliga
Los merengues llegaron a liderar por 10 puntos de diferencia al CSKA de Moscú. Su buen juego interior no encontró resonancia en el tiro a distancia: solo 29.2% de triples.
No pudo ser para el Real Madrid Baloncesto. Después de un gran comienzo y tres cuartos convencientes, el equipo de Pablo Laso perdió la brújula en el último periodo y cedió su ventaja de 10 puntos para el CSKA Moscow, que regresó a base de juego interno, potencia en la pintura y un par de tiros libres a raíz de una falta técnica pitada a Laso. Al final, no habrá undécima Copa de Europa este año para el Madrid y los moscovitas disputarán su segunda final de la Euroliga en cuatro años.
La debacle del Madrid se explica desde varias aristas. Los blancos dominaron la tabla (31-38), ocuparon mejor los espacios (16 asistencias) y compitieron el porcentaje de campo (44%), pero se abandonaron en el triple (29.2%). De hecho, ningún jugador merengue registró más de un triple en todo el partido. El símbolo de la dejación fue Sergio Llull. Otrora héroe madridista, el base español cuajó uno de sus peores partidos vestido de blanco. Pese a que su triple final dio esperanza para el parcial de 93-90, y sus 13 puntos fueron más que dignos, su 1/10 desde detrás del perímetro fue el síntoma. Pablo Laso probó a intercambiarlo por Campazzo, quien tampoco rindió al nivel esperado: 10 puntos y 2/8 de campo. El Madrid sumó puntos en la pintura (20), y un 55% desde el banquillo. Pero, sin triple, no hay futuro. El CSKA tiró para el 50% con el exmadridista Sergio Rodríguez con un buen récord (3/5). De Colo no estuvo solo.