Giancarlo Maldonado: “Me duele ver la situación de Venezuela”
El exgoleador del Atlante, campeón del Apertura 2007 con los Potros de Hierro, figura estelar del fútbol venezolano en la última década, charló con AS sobre su presente.
La afición del Atlante recuerda con aprecio a Giancarlo Maldonado. Artífice y puntal del último campeonato de liga que conquistaron los ‘Potros de Hierro’, en el Apertura 2007, el caraqueño se inscribió en el panteón azulgrana gracias a sus 18 goles a lo largo del certamen (57 vestido de atlantista), incluido uno en el partido de vuelta de la final frente a los Pumas. El pase al vacío del ‘Chícharo’ González encontró a Maldonado con una pradera por delante; después de esquivar a Sergio Bernal, acarreó la pelota para eliminar a un último central que tropezó consigo mismo y entró a la portería con el cuero en los pies. El Estadio Andrés Quintana Roo entró en ebullición. 30 minutos después, el bombazo de Clemente Ovalle estalló en la escuadra superior de Bernal, y el Atlante volvió a alcanzar las estrellas. En medio del agasajo, entre el mar azulgrana que inundó el campo de juego, la bandera venezolana navegaba orgullosa.
Once años y medio después, el periplo ha llevado a Giancarlo Maldonado de ida y vuelta a Venezuela en tres ocasiones; siempre, con una estadía Cancún de por medio. Uno siempre vuelve a los lugares en los que fue feliz. En tierras 'aztecas', también militó en Atlas, Tepic y Alebrijes de Oaxaca. "Siempre extraño México. Radicado en Cancún hace 12 años, me enamoré de un país que me ha dado todo el cariño, respeto, grandes amigos, y lo más importante, mi familia", se sincera el ariete en entrevista con AS desde Táchira, donde integra las filas del equipo local (Deportivo Táchira), uno de los clubes más populares y ganadores del país.
México está en sus recuerdos y Venezuela, en su presente. Maldonado vive y sufre en carne propia la delicada situación política que asola a su país. Él y su familia han sufrido los habituales cortes de energía eléctrica durante días, la inestabilidad del servicio de telefonía y la tristeza de sus connacionales, conocidos, amigos y extraños: "Son años muy difíciles y cada vez se complica más la situación. Me duele, como venezolano, ver la situación que atraviesa mi país. Somos una nación con todo para ser uno de los países más ricos del mundo, para generar muchas cosas para que la gente realmente sea feliz y no tenga que vivir en esta tristeza y penurias", compartió. Sin embargo, el exgoleador atlantista es optimista de cara al futuro y envía un mensaje de aliento para sus compatriotas dentro y fuera de las fronteras venezolanas, con mención especial para quienes han emigrado hacia otras latitudes: "Estoy seguro de que el cambio está por llegar y todo se irá acomodando poco a poco para que quienes sueñan con regresar puedan hacerlo y reunirse nuevamente con sus familias".
Nexo paternal
La primera ocasión en la que Maldonado recaló en el Deportivo Táchira fue en 2013. Volvió un año después y en 2016 para una tercera época, la más especial de todas, pues su padre, Carlos Maldonado, figura histórica del club, fungía como entrenador. "Siempre es una exigencia al doble o hasta el triple el estar bajo su mando, más que con cualquier otro técnico. Siempre es un orgullo y una satisfacción muy grande poder trabajar junto a uno de los mejores técnicos que me han tocado en mi carrera", confiesa el exdelantero de la 'Vinotinto'. Sin embargo, la razón por la que Maldonado regresó a Venezuela desde su última etapa con Atlante (mayo de 2018) no fue deportiva, sino para estar cerca su padre, diagnosticado con cáncer de piel: "Gracias a Dios ya salimos adelante y está superado totalmente y dirigiendo otra vez (al Academia Puerto Cabello)".
Todo se irá acomodando poco a poco para que quienes sueñan con regresar puedan hacerlo y reunirse nuevamente con sus familias
Su asignatura pendiente es lograr el campeonato con el club aurinegro: “Tengo mucha ilusión de que esta sea la buena”, sueña. Actualmente, el equipo ocupa la sexta posición del campeonato y está cerca de confirmar su pasaje a los cuartos de final, instancia en la que ya se ha inscrito Carabobo F.C. Maldonado se está recuperando de una operación de limpieza de cartílago en una rodilla y cada día se siente con más confianza para volver a los terrenos de juego. Si el título con el Táchira sería un cierre de oro, tampoco cierra las puertas a una quinta época en sus queridos Potros de Hierro: “Jamás dejará de ser una opción regresar. Mientras esté en activo, mientras me sienta bien y tenga alguna posibilidad de regresar, la ilusión siempre está”.