El ‘Black Power’, la petición de justicia social para toda una raza
En uno de los momentos más significativos de México 68, los norteamericanos Tommie Smith y John Carlos levantaron un puño con guante negro durante su himno.
Hace 50 años, el mundo era muy diferente, los problemas raciales en Estados Unidos eran una cuestión seria. Fue entonces que la pista del Estadio Olímpico Universitario se convirtió en testigo de una imagen de protesta mundial.
La mañana del 16 de octubre se compitió la carrera de los 200 metros masculinos. El atleta estadounidense Tommie Smith consiguió el oro con un récord de 19.83 segundos, la medalla de plata fue para el australiano Peter Norman y el tercer lugar fue para el también estadounidense, John Carlos.
Ambos atletas norteamericanos eran de raza negra y al momento de salir a la premiación, cada uno portaba un guante negro. Cuando se entonó el himno nacional de los Estados Unidos, Smith y Carlos agacharon la cabeza y levantaron el puño como símbolo del 'Black Power'.
Al marcharse de la premiación, un gran sector del público abucheó a los atletas y la imagen circuló y fue portada en medios de todo el mundo.
Posteriormente, Tommie Smith dijo "si gano, soy americano y no afroamericano, pero si hago algo malo, entonces se dice que soy un negro".
En una reciente entrevista Smith habló de los hechos. "Fue hecho por una razón: justicia social, por la ignorancia de los hombres, de aquellos que no creen en los derechos humanos o de quienes no tienen la necesidad de pensar o lidiar con los derechos humanos. Y pienso que es muy importante".
El Comité Olímpico Internacional lo consideró un gesto de política y pidió la suspensión inmediata de Smith y Carlos del equipo estadounidense, además de pedir que fueran expulsados de la Villa Olímpica. Sin embargo, el Comité Olímpico Mexicano se negó expulsarlos pues al tener sus visas de deportistas seguirían siendo invitados de honor en el país y los tratarían como tales.
Al regresar a Estados Unidos fueron criticados, incluso recibieron amenazas de muerte junto con su familia. Este hecho se convirtió en un símbolo que quedó en la historia del olimpismo y de los derechos civiles en el mundo.
Con información de Pasión W.