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Lopetegui no ve bien lo de Miami

San Mamés abre hoy sus puertas al Madrid, lo que equivale a noche de gran emoción. Desde tiempo inmemorial, nada motiva tanto a San Mamés como las visitas del Madrid, aunque esta vez se echará en falta algo: Cristiano. Como en casi todas partes, era el objeto de los gritos del público, por su altanería, y hay quien se pregunta por la calle quién puede sustituirle en ese papel de villano. Para el Athletic es el tercer partido del campeonato, los tres en San Mamés, curiosamente. Recibió al Leganés, recibió al Huesca porque El Alcoraz no estaba listo y cuando le tocaba ir a Vallecas hubo de aplazarse por la mala condición de las gradas.

Así que tercer partido en casa por ninguno fuera, pero se espera con ganas, porque entre el aplazamiento de Vallecas y el parón de selecciones el Athletic lleva tres semanas sin jugar. Tiempo que no ha servido para resolver la crisis de la portería. Remiro sigue en sus trece y a Herrerín no se le quiere precipitar la recuperación. Volverá a jugar el jovencísimo Unai Simón, que fue repescado del Elche para la emergencia, y está cumpliendo bien. Hoy le pondrá a prueba el nuevo ataque madridista, en el que no está Cristiano, pero a Bale y Benzema se les ve más enchufados que nunca, y Asensio tiene un mazo en la izquierda, como comprobó Croacia.

Para el Madrid es el primer partido de enjundia después de un arranque de campeonato con rivales discretos, con los que acumuló tres victorias, buenas tras el chasco de la Supercopa. Quizá falte Casemiro, al que este virus FIFA le ha apretado más que a otros. Pero la preocupación mayor es Marcelo, que ha empezado el curso más confiado que nunca, y por su lado puede encontrar Williams, bueno ya de por sí, muchas facilidades. Como es su costumbre, Lopetegui no adelantó alineación, pero sí dijo algo: que no le parece bien que el Barça tenga la ventaja de ‘visitar’ al Girona en Miami y no en Montilivi, y eso es difícilmente rebatible.