Márquez corre sin rivales

Los intentos de adelantamiento de Lorenzo a Dovizioso, cargados de tensión, sirven para explicar en la pista su intensa rivalidad dentro del box de Ducati, más después del último cruce de declaraciones y reproches. Los dos quieren acabar su relación diciendo la última palabra, de momento ese premio de consolación es para el italiano, que gana en Brno su segunda carrera, tantas como lleva Jorge esta temporada. Su pelea seguirá, uno quiere reivindicarse como buen piloto y el otro como campeón del mundo. Pero no es más que eso, un premio de consolación. Quizás el de la combatividad.

Al menos tienen a quien ganar, porque Márquez… Si encendió la calculadora en las últimas vueltas del GP de la República Checa sólo lo sabe él. Si no lo hizo, qué más le da. El segundo clasificado del Mundial es Valentino Rossi: 39 años, rescatando puntos y a veces podios los domingos, pero con una Yamaha que lleva más de un año sin vencer una carrera. Su rivalidad también es intensa, es cierto, pero que no existe en la pista, como tampoco existe con Viñales. Esta temporada, algunos pilotos aspiran a ganar carreras, otros aspiran a ser mejores que sus compañeros. Quedan nueve carreras para que acabe el curso y sólo uno aspira a ganar el Mundial. Márquez corre sin rivales.