Una vez más, el Clásico Tapatío de la Liga MX Femenil se pinta de rojo y blanco.
Es ya una maternidad en esta incipiente competencia. Este sábado, el Guadalajara ha derrotado por 2-0 al Atlas, en la cancha del Estadio Jalisco. Con ello, en cinco enfrentamientos tiene saldo de cuatro victorias y un empate.
El partido parecía iniciar bien para las rojinegras, que tomaron la iniciativa ante de uno de los equipos más fuertes del Grupo 2. Apenas al minuto 4, Fabiola Ibarra pateó desde fuera del área. La portera Blanca Félix voló y alcanzó a rozar la pelota. Lo suficiente para que pegara en el travesaño. Así se salvó el Rebaño Sagrado.
La respuesta fue letal: del medio campo y tocó rápido. Le devolvieron una pelota profunda que la dejó de cara Rubí Soto robó el esférico adelante a la guardameta. Ante su salida, definió cruzado de pierna izquierda. La pelota estremeció las redes al minuto 18.
Entonces, Chivas tuvo mayor dominio de los tiempos y estableció su ritmo sobre el terreno de juego. Para la segunda parte, fue inteligente para esperar los espacios que el rival debía dejar abiertos por su necesidad de ir al frente en busca del empate. Así fue como el Guadalajara logró liquidar.
Descolgada por el costado izquierdo de Norma Palafox, quien avanzó a toda velocidad, levantó la mirada y tocó con enorme precisión. Servicio raso que cruzó el área, dejando sin oportunidad tanto a las defensas como a la guardameta. Brenda Viramontes sólo tuvo que llegar a empujar la redonda a las redes. Fue el 2-0 de Chivas, al ‘62.
Atlas se volcó al frente más con orgullo que con futbol. Pero se topó una y otra vez con una Blanca Félix en plan grande. Las rojinegras no pudieron acostar distancias. El marcador permaneció y las rojiblancas se llevaron una vez más el duelo del honor, ahora por 2-0 de visita en el Jalisco. Es ya toda una maternidad.