La maldición del campeón del mundo se hace presente en Rusia
Cuatro de los últimos cinco monarcas de la justa mundialista, no lograron avanzar de la fase de grupos al certamen siguiente y quedaron eliminados.
La historia de los mundiales tiene una maldición difícil de romper para quienes llegan como vigentes campeones del mundo al certamen, dado que la mayoría han quedado eliminados en la fase de grupos. Así ha ocurrido en los últimos cinco campeonatos.
El último en sufrir esta malaria fue Alemania, quien llegó a Rusia 2018 como campeón del mundo pero no pudo avanzar a la siguiente fase e incluso terminó en el último lugar del sector F, detrás de Suecia, México y Corea del Sur.
Antes, en el Mundial de Brasil 2014, quien llegó como campeón fue España y tampoco pudo clasificarse en el Grupo B, donde estaba junto a Holanda, Chile y Australia.
Mismo caso ocurrió con Italia en Sudáfrica 2010, donde se presentó como el monarca pero tampoco logró superar la fase de grupos. Culminó en el último lugar del sector F, detrás de Paraguay, Eslovaquia y Nueva Zelanda.
En Alemania 2006, Brasil logró ser la única excepción de estos últimos cinco mundiales y sí clasificó a la segunda ronda como campeón defensor. Además, lo hizo como líder del Grupo F, en donde también se encontraban Australia, Croacia y Japón.
Sin embargo, en Japón-Corea 2002, el vigente campeón Francia tampoco pudo clasificar a la siguiente ronda y además fue último lugar del Grupo A, donde también estuvieron Dinamarca, Senegal y Uruguay.
