Girona sorprende y derrota al Villarreal a domicilio
El cabezazo del delantero y la rosca del hondureño, tras fuera de juego, ratifican la candidatura del Girona para pelear por el séptimo puesto ante un triste Submarino.
El Girona ganó de nuevo a un gallito de LaLiga en su inmaculada temporada, por lo que el 0-2 ya no es ni una sorpresa.
Lo que asombra de esta revelación es que mientras hoy habría que hablar y escribir de su consecución matemática de la permanencia con 40 puntos en la saca, las crónicas deberán centrarse en las aspiraciones por Europa del mejor debutante en Primera. Con mucho oficio y solidaridad tumbó al Villarreal, del que sólo le separa un punto, firmando su primera victoria a domicilio en 2018 y ampliando la galopante crisis del Submarino, que acumula seis pinchazos en los últimos siete partidos en un arranque de año al que debe añadir unas eliminaciones en Copa y en la Europa League sin noticias de su sello y sin pelea.
Machín propuso el partido perfecto en el primer tiempo para paliar el cansancio de su equipo, que jugó con el mismo once que ante el Celta, y para acentuar además el atasco mental del Villarreal, que comenzó con seis novedades pero que manifestó las mismas dudas que arrastró en Eibar. El Girona se protegió con ese 3-5-2 que convierte en un fortín en defensa, obligó a su rival a tener que hilvanar demasiados toques perfectos sin ideas y salió a la contra como desahogo y amenaza. El gol de Stuani (0-1) pareció demasiado premio para su escueta apuesta ofensiva y un castigo extremamente severo para el único error que cometió el Submarino hasta el momento. En ese minuto 16, Granell cortó un inocente balón de Rodrigo en la salida para que Borja García lo colgase en el área y Stuani lo cabeceara imponiéndose a Álvaro. El central del Villarreal no guardará buen recuerdo del reencuentro con su excompañero en el Racing y en el Espanyol. El uruguayo ya lleva 14 goles. Su techo. Algo similar le sucedió al defensa con Bernardo, tantas noches su socio en El Sardinero: el colombiano pudo haberle hecho penalti por agarrón en el 43’, pero González Fuentes entendió que el hecho de que le rompiere la camiseta se debió más a la pasión y a la alegría de volverse a verse que a la necesidad de derribarlo.
Calleja se agobió pronto con el resultado, así que corrigió en el descanso una vez más su alineación. Quitó al eslabón más débil (Raba), que no al más defectuoso, para aferrarse al delantero más en forma (Enes Ünal), que no al mejor goleador. Ése se marchó dolorosamente en enero a la liga china. Machín, pese al cansancio, quería dejar todo igual. Ya había perdido a Planas por lesión en el 24’. Así, el partido siguió el mismo guion en cuanto a dominador y dominado, y añadió una marcha más en la combinación del Villarreal y un punto más de solidaridad del defensivo planteamiento del Girona. Bacca, algo frustrado, lo intentó de todas las maneras sin fortuna. Bono estaba resguardado. El Villarreal volvió a repetir la imagen de los últimos partidos, en los que juega sin saber a toque de corneta en busca de la remontada, y se mostró más centrado en pedirle penaltis al colegiado (alguno pudo haber) que en sus virtudes para derribar la muralla. No disparó demasiado, pero lo hizo con peligro. Soriano tuvo la mejor ocasión. Y ni por esas. Este Girona es una roca. En otra salida de la cueva, sentenció. Portu recibió en fuera de juego, cedió el balón a Lozano en el borde del área y el hondureño, con alma y calidad, soltó una rosca a la escuadra. La jugada, casi de puntillas, resume a la perfección a este histórico Girona. Poco ruido y muchas nueces.
Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
---|
Próximos partidos |
---|
Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
---|
Próximos partidos |
---|