Marcos no se pierde ni un solo partido de su hijo en el Chelsea
El exfutbolista del Barça viaja todos los fines de semana a Inglaterra para estar cerca del lateral zurdo
Marcos Alonso Peña no olvida su pasado. Futbolista eléctrico y por un tiempo el fichaje nacional más caro de la historia del club, el ex atacante azulgrana ve el futbol desde la grada, aunque el corazón sigue acelerándose cada fin de semana. Hijo de futbolista y padre de profesional, Marcos está siempre que puede cerca de su hijo, carrilero zurdo del Chelsea y jugador irremplazable para Antonio Conte.
Tras salir del Madrid y volar a Inglaterra, Marcos tuvo que hacer cambios importantes en su vida para poder no perderse ni uno de los partidos en los que juega su hijo. El hoy futbolista del Chelsea declaró hace un tiempo que se hizo “madridista a muerte” por su abuelo, pero no por ello ha dejado de ser un jugador interesante para la secretaría técnica del Barcelona y Marcos declaró hace ya un tiempo que “me gustaría que mi hijo jugase en el Barça”.
Con la Selección como gran objetivo, Marcos trata de seguir destacando en el Chelsea. Jugará de nuevo con sus compañeros tras tres partidos ausente y Ernesto Valverde y sus ayudantes saben a ciencia cierta que “por el perfil zurdo, entre él y Eden Hazard, puede venir gran parte del peligro”. Carrilero profundo y de excelente golpeo de balón, Marquitos pretende acabar de convencer a Julen Lopetegui, que no lo mira con malos ojos, pero según comenta en pequeños foros hay muchas alternativas en varios equipos.
Marcos viajará a Londres y volverá a ocupar su plaza en la zona noble de Stamford Bridge. Allí pocos le conocen, pocos saben que es el padre de una de las estrellas del Chelsea y menos que un día fue un jugador de elite, un internacional español.