Bogdan Bogdanovic: líder de la 'Horda' y sucesor de Ilgauskas
El escolta serbio es un gran aficionado al videojuego World of Warcraft. Tras firmar el mayor contrato rookie de la historia, es el nuevo MVP del Rising Stars.
El serbio Bogdan Bogdanovic dejó el pasado verano el Fenerbahçe tras proclamarse campeón de la Euroliga a las órdenes de Zeljko Obradovic para recalar en la NBA, en los Sacramento Kings. Un equipo joven y por hacer en el que está causando muy buena impresión. Esta noche, se reivindicó en el Rising Stars Challenge con 26 puntos, 6 asistencias y un 7/13 en triples para comandar el triunfo del Resto del Mundo ante Estados Unidos. 20 años después de que lo lograra Ilgauskas por primera vez, Europa vuelve a tener un MVP en el partido de novatos.
World of Warcraft
¿Por qué su cuenta de Twitter es LeaderOfHorde? Por una de sus grandes pasiones: el videojuego World of Warcraft. Horde (Horda) es una de las facciones políticas que habitan en el mundo de Azeroth. Sus enemigos son la Alianza. Por cierto, tras el partido la cuenta oficial del videojuego le felicitó por su MVP:
Siguiendo los pasos de Mirotic
Ambos jugadores fueron elegidos dos años consecutivos como mejor joven de la Euroliga (los únicos que lo han logrado) y ambos, seleccionados en primera ronda del draft, esperaron para ir a la NBA. Tres años años después de ser elegido, igual que el hispano-montenegrino, negoció su propio contrato con los Kings. Acabó firmando el mayor contrato rookie de la historia: 27 millones de dólares a repartir en tres temporadas.
Una ruptura en el Eurobasket
"Es el mejor jugador que ha tenido Serbia en los últimos diez años", comentó sobre él Milos Teodosic. Desde que aterrizó en la selección, Serbia ha ganado tres platas: en el Mundial de España (2014), en los Juegos Olímpicos (2016) y en el último Eurobasket (2017). Su peor campeonato fue el Europeo 2015, donde su equipo acabó cuarto. Las malas lenguas dicen que la causante fue su exnovia, la modelo Anja Skuletic, que le dejó justo durante ese campeonato.
Estambul, su segunda casa
Con 22 años se marchó de su Serbia natal para jugar con el Fenerbahçe. No tuvo muchos problemas para adaptarse: allí le esperaban Obradovic, Bjelica... y su excompañero en el Partizán Vesely. "Aquí hay varios jugadores que hablan serbio y el entrenador me ha ayudado mucho... así es más fácil adaptarse", recordaba por aquel entonces el escolta, que incluso ha aprendido algo de turco. "Sé contar hasta diez". Tres años después abandonó Estambul para iniciar su aventura NBA en Sacramento.