Así prepara Marc Márquez las ‘salvadas’
El campéon del mundo realiza entrenamiento en circuito de motocross, trabajo de fuerza en el gimnasio para mejorar la tonificación muscular y se ejercita con las bolas de bosu.
Marc Márquez ha sido cuatro veces campeón del mundo. Uno de los más habilidosos sobre la moto, evita caídas como el que nadie y hoy descubrimos el secreto de las ‘salvadas’, donde se unen los reflejos, la tonificación muscular, saber reaccionar en décimas de segundo y su talento, por supuesto.
Trabajo de elasticidad
“Con mi preparador empecé a entrenar a los 11 años, centrándonos mucho en la elasticidad, que es lo que te permite, en caso de caídas cuando das vuelta en la grava, tener menos riesgo de lesión”, indica. El objetivo es doble: mejorar el rendimiento encima de la y reducir las posibilidades de lesión. Cuando le vemos agarrado a la moto con las manos y no se suelta, esos momentos de tensión.
“Durante un fin de semana de Gran Premio ya detectas uno o dos puntos más críticos en el circuito. “Tienes que estar lo más preparado posible, lo que no significa tener mucha fuerza, sino velocidad de reacción, tonificación, explosividad y manos. En esas situaciones se tira mucho de ingle, porque con una pierna empujas contra el suelo y con la otra, contra la moto. Aunque parece que tienes que levantarte, tienes que empujar contra el suelo y eso, a veces, hace que te levantes”, desvela.
Trabajo de gimnasio
Esa fuerza, mantener el equilibrio, y el trabajo con tres bosus es clave para estar preparado para el más mínimo detalle. “El equilibrio es un punto importante, así como los reflejos, porque la moto se te puede mover dos o tres veces en una curva y tu cuerpo tiene que reaccionar rápido”, aclara.
“Vamos adaptando el plan a lo que necesitamos en cada momento. Una MotoGP te exige mucho en el tronco superior, la parte abdominal y las piernas, la zona del aductor, porque es con lo que te aguantas al depósito”, indica.
A la vista de los resultados, está claro que los abdominales son un punto vital para el piloto catalán. Los cambios en las curvas, los giros, la posición, la fuerza, le ayudan a pulir el físico y aguantar horas en los entrenamientos y las carreras.
Sobre dos ruedas diferentes
Al trabajo en el gimnasio, Márquez suma la que es su gran pasión: el motocross: “Aunque sea el mismo circuito, de una hora a otra cambia totalmente: se van creando baches, roderas en cada vuelta, esto te hace improvisar muchísimo y te da esa velocidad de reacción. Es el entrenamiento más completo y, personalmente, la moto sobre la que más disfruto”.