Otra remontada fallida para los Raptors ante los 34 de Embiid
Toronto pasó de 20 a 1 de desventaja en el último cuarto, pero no pudo rematarlo con una victoria. Joel Embiid fue el mejor con 34 puntos.

Philadelphia 76ers vuelve por la senda de la victoria (117-111) tras el patinazo en Londres ante los Celtics, ganando a unos Raptors que suman la segunda derrota seguida y a los que retienen más en esa segunda posición del Este.
Joel Embiid fue el más destacado del encuentro, no sólo por los 34 puntos y 11 rebotes que concentró sino por ser de nuevo la referencia de principio a fin para los de Brett Brown. Los Sixers suman 6 victorias en los últimos 8 partidos que han disputado.
Joel Embiid scores a game-high 34 PTS to go along with 11 REB, as the @Sixers hold on to defeat the @Raptors 117-111!
— NBA (@NBA) January 15, 2018
DeMar DeRozan: 24 PTS, 5 AST#HereTheyCome pic.twitter.com/gfqDeSKgoO
Tampoco hubo remontada esta vez
Los Sixers siempre fueron por delante, desde el primer minuto. La buena selección de tiro de Joel Embiid, que también las metía, ayudó a ello. En los últimos minutos del primer cuarto los locales comenzaron a despegar seriamente, tomando ya unas ventajas que rondaban la decena. Se llegó al inicio del segundo tiempo con 32-23.
Se jugaba por dentro. En esta mitad del partido los dos contendientes acreditaron 3/18 en triples entre ambos. Y los 76ers se dieron cuenta. Trevor Booker aportaba 7 puntos en 7 minutos saliendo desde el banco y la situación se estabilizó en esa barrera psicológica de los diez. La frustración de los Raptors viene del intento de remontada ante los Warriors y se personificaba en DeMar DeRozan, que era el que tiraba del carro, con un empujón a T.J. McConnell que frenaba el reloj pero no el ritmo. Una canasta del propio DeRozan llevaba el 59-49 al luminoso tras veinticuatro minutos.
Y, tras el descanso, más madera. Philly estiraba más el marcador. Los Raptors se desquiciaban, como lo demostraban las técnicas a Casey y VanVleet. Estaban fuera del partido, no encontraban ritmo y se les escapaban el rival. Y dice la estadística que con Joel Embiid metiendo 22 puntos o más los Sixers ganan un 50% más de partidos, y en el tercer periodo ya los tenía. Además de poner la estadística de su lado, el camerunés no daba respiro ni a su compatriota Siakam y lideraba otra nueva reacción: 11-2 en tres minutos. En el 34 llegaron a los veinte de ventaja (89 69). Mucho se tenía que torcer.
Pero esto es la NBA y las remontadas llegan si te relajas. Y eso le pasó a los de Pensilvania. Con la entrada de Delon Wright, que estuvo realmente acertado, los Raptors fueron comiéndose poco a poco esa desventaja. Un 3-15 de parcial en tres minutos les ponía directamente a jugarse el partido de verdad, tanto que llegaron a ponerse a uno (102-101, minuto 47). Los Raptors intentaron fugazmente un 'hack-a-Simmons', pero los balones eran para el resolutivo Embiid ya fuera por rechaces, faltas o canastas. Sólo lo apretaba un poco Kyle Lowry, que volvía tras una pequeña lesión, pero después de meter un triple perdió dos balones seguidos y se cerró el partido con la expulsión de Simmons por doble técnica, ya en mitad del carrusel de tiros libres. Al final, 117-111.