Bortles puede hundir a los Jaguars
De todas las estadísticas que arrojaron los juegos de Wild Card, la que más me llamó la atención es esta: Blake Bortles, de los Jaguars, se convirtió en el segundo quarterback en las últimas 25 temporadas que gana un juego de postemporada con más yardas por tierra que por aire (88-87). El otro fue Michael Vick, de los Falcons, en la Ronda Divisional de 2004 contra los Rams (119 yardas por tierra; 82 por la vía aérea).
“Eso no suele ser lo ideal para un quarterback”, dijo Bortles.
Detrás de una férrea defensiva que únicamente permitió 133 yardas por aire y 263 totales a los increíblemente inofensivos Bills, Jacksonville cumplió en casa y avanzó a la Ronda Divisional. El siguiente rival es Pittsburgh.
Pero para ganar por segunda ocasión en la campaña en Heinz Field, los Jaguars van a necesitar más que 87 yardas de Bortles o las 57 yardas por tierra del novato Leonard Fournette.
Sí, la defensiva se comportó como lo que es: una de las mejores de la NFL. Pero ni los Steelers son los Bills ni Ben Roethlisberger va a jugar tan mal como a principios de octubre, cuando fue interceptado cinco veces en la humillante derrota 30-9 ante estos Jaguars.
Jacksonville ha anotado 20 puntos en sus dos partidos más recientes y el principal problema es Bortles, quien perdió la brújula y ahora no atina ni un pase de cinco yardas. En esos dos juegos Bortles ha completado 47.3% de sus pases (27 de 57), con 215 yardas, un touchdown y dos intercepciones.
Las defensivas ganan campeonatos, pero eventualmente vas a necesitar que tu quarterback genere algo a la ofensiva (puntos, de preferencia). Si Bortles no mejora, los Jaguars están condenados, con todo y esa defensa de miedo que se cargan.
LOS SAINTS BIEN, PERO...
Los que sí tienen quarterback son los Saints. Drew Brees pasó para 376 yardas y un par de touchdowns en el cardiaco triunfo de Nueva Orleans sobre Carolina.
La siguiente escala de los Saints es Minnesota, donde les espera la mejor defensiva de la liga. Los Vikings son líderes en cuanto a yardas permitidas (275.9) y puntos por partido (15.8).
Estos dos equipos se midieron en la Semana 1 del calendario regular, con triunfo 29-19 para los Vikings. Pero tanto Nueva Orleans como Minnesota han cambiado tanto que parece que ese juego fue hace cinco años.
Adrian Peterson era la novedad en el backfield de los Saints, aunque esa noche hizo exactamente las mismas 18 yardas que el novato Alvin Kamara.
Peterson se volvió más un problema que una solución y los Saints lo mandaron a Arizona a cambio de una selección de sexta ronda.
Desde entonces, Kamara y el veterano Mark Ingram le dieron a Brees la mejor pareja de corredores que ha tenido en su ilustre carrera.
El de Nueva Orleans terminó la campaña regular como el quinto mejor ataque por tierra de la liga, con 129.4 yardas por partido, pero en el juego de Wild Card del domingo sólo generó 41 yardas (23 de Kamara y 22 de Ingram).
Creo que el equipo que gane este partido será el representante de la NFC en el Super Bowl, pero Nueva Orleans necesita mayor producción por tierra que esas 41 yardas, porque será muy complicado vencer a los Vikings con una ofensiva unidimensional.
Por cierto, la victoria de los Saints por 31-26 sobre Carolina fue el primer partido de postemporada con al menos dos receptores de 100 yardas por cada equipo desde el Juego por el Campeonato de la AFC de 2009: Michael Thomas (131 yardas) y Ted Ginn Jr. (115) de los Saints, y Greg Olsen (107) y Christian McCaffrey (101) de Panthers.