Entre el cielo y el suelo
La NFL le tiene fobia a las dinastías.
Sí, sí, por supuesto que ahí están los Patriots, pero ellos son un error en el sistema (un “error” que, por cierto, ya duró casi 18 años). Pero, excepto Nueva Inglaterra, ningún equipo ha sido capaz de tener éxito constante desde la campaña del 2000.
Para cualquier otro equipo que no sean los Browns, el Draft y el calendario son los grandes aliados para transformar una campaña para el olvido en una memorable de un año a otro… y viceversa.
En esta liga hay un portal “mágico” por el que un equipo malo o mediocre pasa y a la siguiente campaña es un contendiente.
Desde que se adoptó el formato de 12 equipos en Playoffs, en 1990, año con año al menos cuatro franquicias han clasificado a la postemporada una campaña después de estar fuera del minitorneo rumbo al Super Bowl.
En 2017 serán ocho. Leíste bien: ocho equipos que en 2016 vieron los Playoffs por televisión y que un año más tarde tienen legítimas posibilidades de levantar el Vince Lombardi en febrero.
Hay seis que ya tienen boleto a la postemporada: Carolina, Jacksonville, Los Angeles Rams, Minnesota, Nueva Orleans y Filadelfia. Otros dos saldrán el domingo de entre Baltimore, Buffalo, Los Angeles Chargers y Tennessee para llegar a ocho e igualar un récord de la temporada 2003.
De hecho, sin importar si Carolina o Nueva Orleans obtengan el título de la División Sur de la NFC, cinco de las ocho divisiones serán ganadas por un equipo que terminó en tercer o cuarto lugar del sector la temporada pasada.
Los casos más dramáticos son de los Jaguars y Rams, que en 2016 terminaron con récord de 3-13 y 4-12, respectivamente. Hoy Jacksonville está 10-5 y Los Angeles, 11-4.
Los Jaguars regresan a los Playoffs por primera vez desde 2007, mientras los Rams rompen una sequía de 13 años sin jugar en la postemporada.
El formato de competencia no sólo hace impredecible cada campaña sino que da esperanza a 31 de los 32 equipos de la NFL (otra vez, en esta categoría no participa Cleveland). También da oportunidad a que esas franquicias que voltean la tortilla dramáticamente de un año a otro mejoren sus finanzas.
Sigamos con los ejemplos de Jaguars y Rams. Aunque todavía no revelan esas cifras, es un hecho que en 2017 mejoraron dramáticamente las entradas a sus estadios (y por ende los insumos) y la venta de mercancía oficial.
Eso trae balance a una liga que pretende la igualdad en todos los ámbitos, aunque para muchos esto sólo ha servido para alentar la mediocridad.
La NFL está en contra del formato “Barcelona-Real Madrid” que impera en el futbol de España desde hace más de 10 años. Aquí las reglas se han modificado para que los equipos de abajo puedan estar arriba lo más pronto posible.
Los Patriots y los Browns son las excepciones que confirman la regla.
Pero dicen que no hay mal que dure 100 años.