Ha sido la imagen más destacada de la última jornada liguera: Luis Suárez remataba con una espectacular rabona a puerta tras un rechace a otro disparo suyo, pero el árbitro de no daba el gol.
Tras las discrepancias en torno a si Mateu Lahoz y sus asistentes habían acertado o no al no dar por válido el tanto, unas imágenes de Movistar han demostrado que erraron, pues el balón entró completamente.
"Lo vi claro desde mi posición tras rematar, ya que estoy al lado de la línea. Por eso se lo dije al árbitro, aún sabiendo que para el asistenten podría haber sido complicado acertar, ya que el portería podría haberle tapado", dijo el uruguayo a la conclusión del encuentro.