El efecto Wentz
La lesión del quarterback de Filadelfia deja una carrera abierta en la Conferencia Nacional; Minnesota, el nuevo “favorito”.
“Ligamento cruzado anterior”. Las tres palabras que jamás quiere escuchar deportista alguno. Dan más miedo que el “Demogorgon” porque significa parar un año y, en el caso de algunos jugadores de football, es el principio del fin; ejemplos hay muchos, pero el que ahora me viene a la mente es Robert Griffin III. Llegó a la NFL “tocado” de las rodillas, se lesionó en su año de novato, jamás se recuperó y hoy ni a equipo llega.
La rodilla izquierda de Carson Wentz se une a la larga lista y el gran favorito para ser reconocido como Jugador Más Valioso se perderá el resto de la campaña.
Filadelfia ahora está en manos de Nick Foles, un quarterback cuyo récord de 20-17 podría inspirar confianza, pero que prácticamente ha pasado dos temporadas en la banca.
El panorama en la Conferencia Nacional cambia a partir de este momento.
Algo similar les pasó a los Raiders la campaña pasada. Oakland parecía el único equipo capaz de vencer a los Patriots, pero a una semana del final del calendario regular Derek Carr se fracturó el peroné y los Raiders no pasaron de la primera ronda de los Playoffs.
Quizá Foles pueda hacer más con Eagles, pero es un hecho que sin Wentz este equipo no puede ser considerado favorito al Super Bowl.
La NFC, entonces, se queda como una carrera de 100 metros sin Bolt: fin favorito.
¿Candidatos? Los hay, claro: Minnesota (10-3), Rams (9-4), Nueva Orleans (9-4), Carolina (9-4) y hasta Atlanta (8-3), que busca refrendar su título de la Conferencia.
Tampoco hay que descartar a Seattle (8-5) ni a Green Bay (7-6), que pronto podría tener de regreso a Aaron Rodgers.
Los Vikings parecen tener los argumentos, pero la inexperiencia de Case Keenum en postemporada puede costarles caro.
El domingo en Carolina, la defensa de Minnesota no la pasó bien con Jonathan Stewart, quien corrió para 103 yardas y tres touchdowns en la victoria de las Panthers, 31-24.
Keenum lanzó más pases (44) que en cualquier otro juego de la campaña y fue interceptado en dos ocasiones. De hecho, fueron las primeras intercepciones de los esquineros titulares de Carolina, Daryl Worley y James Bradberry.
Los Rams cuentan con un ataque dinámico comandado por Jared Goff, pero el equipo angelino es joven en todas sus líneas, incluido el coach Sean McVay.
Quienes sí tienen experiencia en Playoffs son la dupla que conforman Drew Brees y Sean Payton, quarterback y coach, respectivamente, de los Saints. Juntos han estado en 11 juegos de postemporada; han ganado seis, incluido un Super Bowl.
Carolina y Atlanta son los dos más recientes representantes de la NFC en el juego por el título de la NFL. Panthers han ganado cinco de los seis más recientes y Falcons, cuatro de los últimos cinco. Estos dos equipos chocan de nuevo en la Semana 17, probablemente con el título de la División Sur en disputa.
Y luego están Seattle y Green Bay, que con Russell Wilson y Rodgers siempre son equipos peligrosos en enero.
Si hubiera que elegir alguno hoy, yo diría que Minnesota, pero la NFC está más abierta que nunca.
Y serán unos Playoffs difíciles de pronosticar.