W Deportes
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Green Bay Packers

El peligro que tiene la victoria para los Green Bay Packers

El equipo de Mike McCarthy venció a los Tampa Bay Buccaneers y sigue en la pelea por entrar en playoffs, lo que forzará la vuelta de Aaron Rodgers.

MéxicoActualizado a
PITTSBURGH, PA - NOVEMBER 26: Aaron Rodgers #12 of the Green Bay Packers sits on the bench during warmups before the game against the Pittsburgh Steelers at Heinz Field on November 26, 2017 in Pittsburgh, Pennsylvania.   Justin Berl/Getty Images/AFP
 == FOR NEWSPAPERS, INTERNET, TELCOS & TELEVISION USE ONLY ==
Justin BerlAFP

Hay que ver lo dura y conflictiva que es emocionalmente la vida del seguidor de equipos de las grandes ligas norteamericanas. A todos les ha llegado alguna vez el siguiente momento de duda: ¿quiero que mi equipo gane o miro así de reojo, como sin querer, y prefiero que pierdan para tener una mejor elección en el draft? Si a esa sensación le añadimos el riesgo de tener que hacer jugar aún sin recuperar del todo a tu jugador franquicia, entonces la sensación pasa a ser de pánico a la victoria. Sí, un miedo a ganar que nada tiene que ver con la presión sino con, sencillamente, un indisimulado deseo de perder.

Este año esa gran papeleta le toca a los Green Bay Packers. Ayer ganaron a los Tampa Bay Buccaneers y lo primero en lo que se piensa al ver el resultado es que podría ser hasta peor para el futuro de la franquicia.

El partido en sí fue una demostración del estado de ambos equipos. Los Packers están capitidisiminuidos desde la lesión de Aaron Rodgers, su quertarback titular, estrella, capitán, hombre calve de la franquicia y Grande De Wisconsin. La ausencia de su perenne candidato a MVP ha desnudado todas las vergüenzas de la plantilla y del cuerpo técnico que la dirige y ha dado lugar a una serie de derrotas que, a todas luces, les dejaba con la mente puesta en 2018. Además, Brett Hundley, el QB reserva, se ha mostrado como un peor jugador de lo esperado. Los Bucs, por su lado, son la gran decepción del año. O una de ellas, al menos.

Es por eso que, jugando en Lambeau Field, tampoco es de extrañar que ganaran los Packers con 84 yardas de pase de Hundley en un pútrido esfuerzo de 13 de 22 pases completados.

Y, por el mismo argumento de lógica gravitacional, esto es, las cosas caen por su propio peso, se puede apostar que los Packers son claramente favoritos para ganar a los Cleveland Browns la semana que viene. Los Browns, huelga subrayarlo, marcan un horripilante récord de 0-12: pueden, y deben, ser batidos por Green Bay.

Si eso sucede, los Packers estarán en un récord de 7-6 con tres partidos por jugar y el sueño de los playoffs aún abierto. Aaron Rodgers podría volver para entonces ¿Sano del todo de su lesión de clavícula? ¿Completamente recuperado? No lo sé. Lo que sí sé es que si existe una sola opción de pelear por el título, el jugador va a forzar su vuelta y no va a haber ninguna fuerza en el entorno de la franquicia que se lo impide. Que lo intente, si quiera.

Eso es un riesgo importante para los Packers. Uno que, estoy convencido, pone nerviosos a muchos en el entorno quesero. Uno que quizás la mayoría no querrían correr. Los Seattle Seahawks y los Carolina Panthers marchan dos partidos por delante en la clasifiación para los puestos de wild card. Los Minnesota Vikings cuatro, con cuatro por jugar, para el título de la NFC Norte. La capacidad de remontada de los Green Bay Packers, aún con Aaron Rodgers, es muy limitada, y la posibilidad de que la lesión se resienta siempre está ahí cuando se apuran los plazos de recuperación. Lo dicho: miedo a ganar. Y no piscológico, no, sino del muy real y físico.