Patriots-Raiders y el renacer de la Ciudad de México
Los Oakland Raiders visitan por segundo año consecutivo la capital mexicana, pero no la encontrarán igual que en 2016.
Un campeón es aquel que logra levantarse sin importar qué tan fuerte haya sido el golpe que recibió. Así es como los Oakland Raiders y los New England Patriots han conseguido ocho títulos y millones de aficionados.
Exactamente dos meses después de que un terremoto de magnitud 7.2 cobró la vida de más de 200 personas y dejó sin hogar a miles más en la capital, la Ciudad de México demuestra que también tiene corazón de campeonato y comienza a levantarse.
Pero la Ciudad de México y sus alrededores no se reconstruyen solos. La ayuda llegó de todas partes, y la NFL junto con Raiders, Patriots y Steelers pusieron su parte con una donación 200, 000 dólares para los esfuerzos de reconstrucción.
La tarde del domingo, exactamente dos meses después de que la tierra se cimbrara, Patriots, Raiders y la Ciudad de México dejarán la tragedia de lado por unas horas. No habrá un ambiente sombrío en el Estadio Azteca, eso está garantizado.
Lo que habrá será un duelo entre dos franquicias icónicas. Un duelo entre el campeón reinante y un equipo que batalla por recuperar su etiqueta de equipo contendiente y lucha por salvar su temporada.
Habrá un duelo entre dos dinastías. Los Raiders, que tuvieron su dominio en la liga a mediados de los 70 y principios de los 80, cuando sumaron tres títulos. Contra unos Patriots que han sumado cinco campeonatos en los últimos 16 años.
Habrá, también, un enfrentamiento generacional de aficionados. La base de los seguidores de los Raiders, que en su mayoría le tomó amor al negro y plata a principios de los 80, contra los fanáticos de los Patriots, la generación del milenio que ha crecido protegida por la sombra del mito de Tom Brady y Bill Belichick e iluminada por el destello de sus cinco anillos de Super Bowl.
Los Raiders ya saben qué esperar de la Ciudad de México. El año pasado jugaron de locales, nominal y literalmente, cuando enfrentaron y derrotaron a los Houston Texans en el mismo Estadio Azteca.
En la semana Derek Carr dijo que espera que el público nuevamente esté de su lado. Podría llevarse una gran decepción. Los éxitos recientes de New England le han valido una enorme cantidad de aficionados, suficiente como para echar por tierra las expectativas de Carr.
Carr y los Raiders necesitan toda la ayuda que puedan recibir. Actualmente están dos juegos por debajo de los Kansas City Chiefs, líderes del Oeste de la AFC, y fuera del panorama de postemporada. Con un calendario complicado y un nivel inconsistente en toda la temporada, las oportunidades de revertir su campaña se agotan.
A pesar de haber ganado dos de sus últimos tres partidos, los Raiders tienen problemas, especialmente con la 22da mejor defensiva de la Liga. No es un buen augurio cuando enfrente está Brady y el cuarto mejor ataque de la liga montados en una racha de cinco triunfos.