MOTOGP | GP DE VALENCIA | ENTREVISTA
"Márquez tiene todo para saltar los nueve títulos de Rossi"
Crivillé da por hecha la cuarta corona del español en MotoGP, asegura que siente "envidia sana por sus títulos" y vaticina muchos más. Aparece el grito homofóbico
Hace días que el motociclismo español espera celebrar el cuarto título de Marc Márquez en MotoGP. Lo conseguirá este domingo en el GP de Valencia, si Dovizioso no gana o, si el italiano cruza primero la meta, acabando el español entre los once primeros. Sería el séptimo para los nuestros de los últimos ocho que ha habido en juego: cuatro de Márquez, tres de Lorenzo y uno de Stoner. Un auténtico lujazo que hace dos décadas era inimaginable. El encargado en abrir la senda victoriosa en la clase reina fue Álex Crivillé, con un su histórico título de 500cc en 1999. Ahora es testigo de excepción en el Ricardo Tormo de como el joven Marc, con sólo 24 años, puede alcanzar un nuevo entorchado. No extraña que diga que siente "envidia sana por los muchos títulos" de su paisano.
—Cuando usted logró el hito del primer título español en la clase reina, ¿imaginó que podría llegar un día otro piloto capaz de conquistarlo cuatro veces como está muy cerca de conseguir Marc Márquez?
—No me lo imaginé, porque pilotos así, como Marc, salen poquísimos. Marc es un fenómeno. Cada época tiene sus pilotos y, en este momento, Marc es un piloto único, un fenómeno. No digo que sea el mejor de toda la historia, porque para eso hay que remontarse a 1949 y no sabemos si era mejor que Cecotto, que Surtees o que Nieto. Lo que sí sabemos es que es el mejor en esta década de MotoGP. Y además es muy joven, porque sólo tiene 24 años y lo tiene todo para saltar la barrera de los nueve títulos de Rossi y sumar muchos más, pero sin olvidar que hay que ir paso a paso. Siempre digo que este es un deporte de alto riesgo y que no puedes hacer tan claros los pronósticos.
—Se dice que es más fácil llegar a la cima que mantenerse en ella y usted puede dar fe de ello. ¿Cuál cree que es el secreto de Márquez para estar siempre arriba?
—La ilusión, el trabajo, el don innato que tiene de entrada. Marc ya es mejor que otro piloto haciendo lo mismo. Lo hace fácil. Tiene facilidad para salir y en la primera vuelta meterle ya temperatura al neumático, como hacía Stoner. Y luego, está en el mejor equipo, con una de las mejores motos. Aunque haya alguna que vaya algo mejor que la suya, Honda es Honda, la más potente. ¿Secreto? Todos sabemos lo que hace Marc. Es un tío sano, que entrena en el día a día como nadie y está fuerte físicamente. Disfruta de la vida, sabe desconectar, lo hace todo muy bien y es valiente.
—¿Cuál de sus virtudes le hubiera gustado para usted en su época de piloto?
—(Sonríe). Hombre, con 24 años tener ya seis títulos es una pasada. Yo no le envidio, porque estoy muy contento con lo que conseguí, pero sí que siento enviada sana por los muchos títulos de Marc. Es una pasada. Tiene muchos títulos y creo que va a sumar muchos más. Es un ídolo y destacaría su valentía, su agresividad, un tipo que no tiene miedo. Se cae, se levanta y se olvida de la caída. También es positivo y optimista.
—¿Hay algo en Márquez que le recuerde a usted?
—Sí que hay una cosa. En las pelea de tú a tú, siempre las quiere ganar y yo recuerdo que era igual cuando estaba al lado de Doohan. Cuando se iba, se iba, claro, pero cuando estábamos codo con codo, la mitad las ganaba él y la otra mitad las ganaba yo. Cuando Marc está peleando, difícilmente pierde esa pelea. A veces pasa, obviamente, pero no se da por vencido y lo intenta hasta la última curva.
—Hemos hablado en todo momento dando por campeón a Márquez...
—Sí. Es que lo tiene muy fácil. Lo tiene fácil, pero hay que hacerlo, porque un contratiempo te complica todo, como una mala salida, un motor que no funcione bien, un neumático defectuoso... Pero si todo va como tiene que ir, lo tiene ya en el bolsillo.
—Dígame algo de Dovizioso.
—Alucinante su temporada. Ha madurado, la Ducati no va mal, le ha motivado tener al lado un superclase como Lorenzo, Stoner también ha hecho los deberes como probador. Son un gran equipo.
—Gracias y que disfrute de otro éxito español, pionero.
—De nada. Es un placer.