El Girona ganó en el Ciutat su tercer partido consecutivo. Y ganó bien. Superó al Levante de principio a fin. Ya al descanso se pudo ir con algún tanto en el marcador. Y eso que Munuera le perdonó la roja a Chema en el 12’. Es un equipo bien trabajado que goza de buenos peloteros por detrás de Stuani. Y eso lo mostró ayer ante un Levante que se ha encallado después de un principio de Liga esperanzador. En la primera parte, ni se acercó al área de Bono. Y en la segunda, el golazo de Borja le cortó de raíz lo que parecía una tímida reacción granota.
El Levante no ajustó bien las piezas ante el ya habitual 3-5-2 del Girona. Muñiz retrasó algo la posición de Bardhi, con el fin de igualar numéricamente el centro del campo. Pero no sirvió para contrarrestar el juego de ataque rojiblanco. Y además desconectó a Enes Ünal del equipo, que se vio arriba, como un islote en el Mediterráneo.
Así, el Girona aglutinó la posesión en la primera parte y Portu empezó a generar por el costado diestro. En dos minutos, Chema se pudo ir a la calle por dos entradas al valenciano. Pero Munuera Montero, incomprensiblemente, le perdonó la segunda amarilla. Era el 12’, la acción parecía clave. Antes de todo eso, Stuani podía haber abierto el marcador, pero se le fue alto el remate.
Poco a poco, el Levante fue conteniendo las cometidas del Girona. Un espejismo que duró diez minutos porque antes del descanso, los gerundeses aún tuvieron tres ocasiones para el 0-1. Raúl le hizo un paradón a Granell, tras una gran maniobra. Después, Portu lanzó demasiado cruzado y Bernardo, de cabeza, la mandó fuera.
Tras el descanso, el Levante pareció reaccionar. Morales tuvo el gol pero Bono detuvo con la punta de los dedos. Y a continuación llegó el golazo de Borja del que el Levante no supo reaccionar. Tras varios intentos infructuosos del Levante, Stuani, aprovechó el pase de Pere Pons para poner la sentencia y Ünal debutó con un gol, en el descuento, que de nada sirvió al Levante.
¿Qué sensación le deja el partido?
Tenemos que saber la importancia de los puntos y tenemos que ir desde el principio a por elos. Y saber que los partidos son muy largos. Siempre hay opciones. Hay que intentar llegar vivos a todos los minutos del partido. La derrota es dura pero el fútbol son victorias y derrotas. Hay que saber superar los momentos difíciles.
¿Cómo ha visto a Enes Ünal?
Ha venido a ayudar y a colaborar. Se va a integrar para competir.
¿Qué le falta a este Levante?
Si sólo valoramos las victorias las echamos en falta. Cuando ganemos, el equipo se quitará un peso. Tenemos que acercarnos al principio de temporada. Estamos en una sensación de pesimismo general. Pero en cuanto a puntos estamos en una normalidad.
¿Qué debe cambiar del Levante?
El estado de ánimo no es el mejor. Estamos en ese bucle. Estábamos en casa no generábamos ocasiones, no teníamos el balón... Cuando mejor estábamos es cuando te llevas los goles. Hay que equilibrar el balance defensivo y ofensivo. No podemos desequilibrarnos porque cuando abres espacios te hacen daño. Sólo se puede salir de aquí trabajando. Por puntos estamos en una situación lógica pero hay que cambiar las sensaciones.
Los duelos directos no se han ganado. ¿Le preocupa?
Todo preocupa, siempre que no sumas. Pero tiene que preocupar lo justo y necesario. Quedan 81 puntos y hay que conseguir 'veinti y pico'. Los puntos valen lo mismo contra todos los equipos.
¿Hay crisis de fútbol?
Hemos dejado de tener el control del partido con balón. En la primera parte no teníamos el balón. Eso genera ansiedad, le da alas al otro equipo. En la segunda parte tuvimos el balón y en ese instante te dan el primer golpe. Nosotros nos venimos arriba cuando pensamos que todo puede salir bien. Tenemos que soltarnos. Tenemos que dar algo a la gente para recibir algo. Nos faltó agresividad e intensidad en la presión. Tenemos que volver a lo que hicimos hace cinco o seis partidos. Hay que acostumbrarse a jugar contra el resultado adverso. Esto no se consigue en febrero. Iremos a mayo... todos juntos.
¿Le viene bien el parón?
Se lo diré después del próximo partido. Hay que seguir igual, poniendo el piñón fijo y no parar. Estamos en un momento delicado en cuanto a estado anímico. Un buen resultado te vacía la mochila.
El once es casi igual al del primer partido de Liga. ¿Por qué no hay más cambios?
No hago un control de qué jugadores juegan cada domingo. Casi todos han participado. En cuanto a puntos el equipo no tiene ningún problema. El entrenador tiene que saber elegir. El equipo tiene que sabe lo que tiene que hacer sin mirar los nombres.
¿Le falta calidad al Levante?
El equipo está compitiendo. De 11 partidos, sólo ha perdido tres. Nos falta algo de atrevimiento o descaro. No tener miedo de lo que puede pasar. Sólo pensar en lo que podemos solucionar. Hay que olvidarse de qué pasa si fallo, si nos marrcan un gol... Hay que sacarlo entre todos adelante.
Julián Burgos