"Nadal ya es una marca que está al margen de sus victorias"
Carlos Costa, mánager del campeón de 16 grandes, analizó junto al profesor Santiago Álvarez de Mon su figura. "Tiene una genética y cabeza privilegiadas".
¿Qué hay detrás del mejor deportista español de la historia? De momento, y principalmente, un mánager que gestiona su carrera. Que ‘monetiza’ los éxitos y mitiga los fracasos. En el caso de Rafa Nadal, Carlos Costa (Barcelona, 49 años). “Rafa Nadal, gestionando la carrera de una leyenda”. Sobre ese concepto le fue preguntando Santiago Álvarez de Mon, profesor del IESE, la prestigiosa escuela de negocios, en el Foro ED17. Un hombre acostumbrado a dar pautas a grandes ejecutivos que decidió escribir un caso de estudio sobre el tenista. Sobre Nadal y sus valores trasladados al orbe empresarial.
“Fui a jugar un campeonato de España a Mallorca y Toni Nadal, a quien no conocía, me dijo que tenía un sobrino de seis años que iba a ser número uno. ¡Imagínense cuál fue mi reacción!”, contó divertido el extenista, que llegó a ser 10º del mundo en 1992.
Luego, Costa colgó la raqueta en 1999, entró a trabajar en la multinacional de representación IMG y pasó a gestionar la carrera del luego campeón de 16 Grand Slams en 2002. “En ese momento yo llevaba a David Nalbandián o Feliciano López. Pero Rafa acabó acaparando el 90% de mi tiempo y en 2012 decidimos fundar una empresa de representación propia”, recuerda.
¿Qué le sigue sorprendiendo de su representado? “La pasión y las ganas con las que trabaja cada día. Con 31 años podría decir, con todas sus lesiones, ‘abandono’, pero cada temporada es un reto nuevo y trabaja como si tuviera 18 años en un mundo tan competitivo, que quema tanto. Yo no tenía esa pasión e ilusión que transmite. Me sorprenden todavía su intensidad y los objetivos claros que quiere sacar de cada entrenamiento”.
Según llegaron los títulos, Costa tuvo que construir y racionalizar también un mundo paralelo alrededor. “El Rafa de antes era un producto en el que las marcas esperaban que ganara para tener visibilidad. Después, él se convirtió en marca y las victorias están al margen. Kia lleva 12 años con nosotros. Nos llamaron ellos en el 2004 cuando se introdujeron en España. Ya ninguno de los patrocinadores asociados está pendiente de sus victorias. Él ya es un embajador”, reflexiona el representante.
“El mánager debe convertir al deportista en producto. Pero para eso debe ganar, y transmitir unos valores. Eso me lo ha facilitado Rafa. Sus padres tienen valores de educación muy fuertes. Son personas con mucho respeto y autoexigencia. Con ganas de mejorar cada día. Nunca tienen suficiente y Rafa ha hecho eso suyo. Pero al final, el bueno es él, aunque Toni sea el que más le ha influido. Si el arquero no es bueno, da igual quién esté al lado. Rafa tiene una genética y una cabeza privilegiadas. Puede estar en tres conversaciones a la vez”, desgranó Costa en el COE.
En la carrera de Nadal, ha sido clave la coincidencia en el tiempo con Federer, que analizó el barcelonés: “Esa rivalidad ha sido lo más en el tenis, y ha traspasado su deporte. Gracias a los dos, ellos y el tenis son más grandes. Hubo una época en la que casi cada domingo había un Federer-Nadal. Eso se notó en el crecimiento del tenis en España y el interés de patrocinadores. Entre ellos hay admiración y respeto. Uno ha ido a la Academia, otro a la Laver Cup…”. También ha coincidido en el tiempo con Novak Djokovic, afectado este año por una crisis de resultados: “Cuando no te sientes tú y no controlas tu fuerza mental, nada tiene significado: ni las victorias ni las derrotas. Eso le pasó a Rafa en 2015. Ahora esas dudas las está teniendo Djokovic, después de tantos años arriba. La presión ‘peta’ al final”
Nadal ya tiene 31 años. La llama sigue viva, en un año en el que ha ganado Roland Garros y el US Open. Pero en el horizonte también se va adivinando ya el final. “Su padre, Sebastiá, era consciente de que después de su carrera había que tener un después. Y este equipo es el que ha creado la Fundación y la Academia, el futuro del jugador”, reveló. “Imagino que se tomará un tiempo libre cuando se retire, porque cuando dejas el tenis vives algo de crisis. Luego seguirá involucrado en el deporte: le gusta el golf, el fútbol, la pesca… Está en las decisiones finales de sus negocios, aunque no en el día a día. Se implicará más. Es una persona muy activa”. Incombustible también fuera de la pista.