Por qué el Atleti no funciona
Cuatro partidos lleva sin ganar el equipo de Simeone y entre la afición hay ciertas dudas, sobre todo porque la Champions se ha complicado.
Mediado el mes de octubre, el Atlético de Madrid se ve en una situación que no se esperaba. En Liga sigue invicto y en posiciones Champions, pero en la competición europea es donde no le ha salido nada y se ha quedado sin margen de fallo: lleva un gol (de penalti) y dos puntos en tres jornadas. En total son cuatro partidos consecutivos sin ganar y hay dudas en el entorno. Hace un año, a estas alturas, el Atleti era líder en Primera y en su grupo de Champions (con pleno de puntos, habiendo ganado al Bayern). Éstas son algunas de las claves…
La falta de pegada
Es la más evidente y la que más lamentan los aficionados, que sospechan, los más pesimistas, si cuando puedan incorporarse Diego Costa y Vitolo no será demasiado tarde. En los mejores partidos y en los peores, el Atleti ha generado alguna ocasión clara que ha lamentado. Así ha sido sobre todo en Champions: en Roma hubo varias, ante el Chelsea una clarísima de Koke y Saúl con 1-0 y en Bakú, Carrasco y Griezmann erraron dos mano a mano. “No marcamos, los delanteros tenemos que trabajar eso y hacer goles”, lamentó el francés tras el partido con el Qarabag. Él lleva tres, como Correa y Carrasco. Torres, Gameiro y Vietto están inéditos.
La estrategia ya no da réditos
Cuántos partidos habrá salvado el Atlético gracias a la pizarra y qué poco le funciona actualmente. "Hablo muchísimo con Burgos de la falta de gol a balón parado”, contaba Simeone en su última visita a El Larguero. Sólo Giménez, en la ya lejana primera jornada (Girona), ha marcado un gol nacido a balón parado. Es más, apenas conecta remates. Contra el Qarabag sí tuvo varios amagos, con el propio Giménez como ariete, pero no entran. El tradicional desatascador del Atlético (en la 14-15 marcó 25 goles de cabeza) se ha estropeado.
Griezmann no encuentra su punto
“Antoine ha tenido en estos últimos años diferentes formas de jugar", explicaba Simeone en la previa del partido ante el Barça. Griezmann ha estado intermitente, arrancó el curso con una absurda expulsión en Girona y desde entonces tampoco ha encontrado su mejor versión. El Cholo le ha sustituido en tres partidos: en dos de ellos, Roma y Leganés, el partido iba 0-0. Sus compañeros le arropan y le esperan y el técnico apunta explicaciones: “Posiblemente se sienta más cómodo con una punta más del estilo de Torres, Gameiro y Vietto”. Normalmente juega con Correa, el más parecido a él. El Atlético necesita a su estrella.
Estados de forma muy irregulares
Salvando a Oblak, el gran sostén de este equipo, el que siempre aparece cuando se le requiere, al resto le está costando mantener una regularidad. Tras el traspié de Montilivi, el equipo cogió vuelo y dejó un tramo de buenas sensaciones (Las Palmas, Valencia, Málaga, Athletic y Sevilla), pero aquello se frenó en seco. Los delanteros no aprovechan sus oportunidades, Carrasco es intermitente, a los laterales les cuesta, el citado Griezmann… La segunda unidad, que parecía haber tirado la puerta abajo, también se ha frenado. Thomas y Correa deben recuperar también su mejor versión.
Seguridad atrás: los centros laterales hacen daño
No puede decirse que el Atlético encaje muchos goles; de hecho, en seis de los 11 partidos ha dejado su portería a cero. Pero su muralla no es infranqueable. Especialmente cuando los balones llegan al área desde las bandas. Los siete goles encajados han llegado de centros laterales, tanto en balón parado como en jugada. El Atleti era infalible en esos bombardeos al área, pero ahora debe apuntalar la que ha sido una de sus mayores virtudes.