Derek Carr estará de baja entre dos y seis semanas

Derek Carr, el quarterback de los Oakland Raiders, estará de baja entre las próximas dos y seis semanas, según confirmó Jack Del Río, entrenador del equipo. Carr tiene una fractura en la espalda y por eso el tiempo de recuperación estimado es tan laxo y poco preciso. Ese tipo de lesiones dependen mucho de las sensaciones de cada jugador.

Si tenemos en cuenta de que pasta están hechos los atletas de la NFL, se puede esperar que la ausencia del QB se acerque más a las dos semanas que a las seis. Una lesión de este tipo es la misma que han sufrido, por ejemplo, Cam Newton o Tony Romo en el pasado reciente, y ambos estuvieron fuera sólo una semana.

En la familia de Carr también hay antecedentes de estas fracturas de espalada. Su hermano, David Carr, la sufrió mientras era el QB titular de los Carolina Panthers. David, acostumbrado a ser el quarterback con más sacks en la liga desde su debut en los Houston Texans, también se perdió sólo un partido por esta dolencia.

Sin embargo, como he dicho antes, los Raiders se van a guiar principalmente por las sensaciones que tenga su QB titular. Es un jugador demasiado importante en el esquema del equipo, tanto en esta temporada como en el futuro, pues por eso le han hecho un multimillonario contrato por cinco temporadas, como para apresurarle con una rotura en la espalda, sitio donde es delicado andar forzando.

En su ausencia será titular en el equipo E.J. Manuel, QB que los fans de los Buffalo Bills conocemos bien y del que no tenemos demasiadas cosas positivas que decir. Además, los Raiders no están jugando demasiado bien incluso con Carr a los mandos, así que no parece lógico esperar que las próximas jornadas sean plácidas para el equipo.

Los dos siguientes rivales de los Raiders son contra los Baltimore Ravens y contra Los Angeles Chargers, por lo que el calendario les ha echado una mano aquí. Si se cumplieran los más optimistas de los pronósticos, Derek Carr estaría de vuelta para el crucial choque contra los Kansas City Chiefs, que es el tercer enemigo que se presenta en el calendario del equipo de Oakland.