Mayoral hizo de Cristiano con Timo Werner en la recámara
No le pudo la presión a pesar de que hasta el partido de Anoeta sólo había disputado el 2% de los minutos. Marcó su primer gol oficial y reivindicó su papel de tercer delantero.
Que Mayoral marcase el primer gol del partido se pagaba a 5,50 euros en las casas de apuestas minutos antes de que comenzara la 73ª conquista goleadora de los de Zidane. Seguramente en el barrio de Fuentebella, donde creció Borja en Parla, es donde más apostaron al ‘21’ negro (el color que vestía ayer). Hoy su padre, José Luis, recibirá muchas visitas en su carnicería de Móstoles, no sólo para comprar la mejor carne sino para decirle: “Enhorabuena, tu hijo cazó a Pelé”.
Posiblemente a Borja le hubiera gustado que las felicitaciones por su primera diana con el Madrid hubieran sido el 2 de marzo de 2016 ante el Levante, cuando De Burgos Bengoechea anotó como gol en propia puerta de Mariño un disparo suyo. “Le pedí que me lo diera a mí”, decía con 18 años. Hoy, con 20, casi podría darle las gracias a aquel árbitro porque su primer tanto no fuera aquel día sino ayer, que sirvió para igualar la racha de 73 partidos seguidos marcando del Santos.
Oportunidad en Anoeta
Sin apenas tiempo (2% de los minutos hasta ayer) ni oportunidades (ante el Levante en la grada viendo cómo se retiraba Benzema del campo) y tras una experiencia fallida en la Bundesliga (dos goles en 426 minutos), a Mayoral no le pudo la presión: tenía que hacer de Cristiano y si decepcionaba, en la recámara ya estaba Timo Werner (un año mayor que él). Su gol, muy de killer instinct como diría Mou, fue con la espinilla (la misma que usó Rubén Cano en Yugoslavia para clasificar a España al Mundial de 1978). Da igual. Había que estar ahí, como hizo Raúl 323 veces con la camiseta blanca. Y alcanzó los 30 km/h para desbordar a Elustondo y propiciar el 1-2. Luego vino la sentencia de Bale. Pero reivindicó su figura en sus 75 minutos en Anoeta.
Puede que aparezca una racha mejor que la del Santos en un país ignoto. Hace dos años el Guinness de los récords de victorias consecutivas fue retirado al Coritiba (24) en favor del Ajax de Cruyff (que en la 71-72 alcanzó 26). Ocurrió también con los 86 goles de Messi en un año natural, cuando un historiador llamado Jerry Muchimba documentó los 107 de Chitalu. No obstante, Zidane sigue a lo suyo, es decir, haciendo historia con el Madrid.