El nerviosismo es patente en la cúpula del club azulgrana
Robert Fernández, cuestionado, dijo que “algunos no han estado acertados”. Si Bartomeu supera la moción puede haber destituciones.
Hay nervios en la cúpula blaugrana, donde se da por seguro ciertos cambios en cuanto amaine el temporal. Bartomeu, en caso de superar el intento de moción de censura, depurará responsabilidades destituyendo a algunos ejecutivos y cambiando de atribuciones a directivos, puesto que a estos últimos estatutariamente no se les puede cesar.
Uno de los que anda en la cuerda floja es Robert Fernández, secretario técnico de la entidad, que en sus declaraciones tras el partido contra el Espanyol no se cortó en las críticas a la prensa (eso no es nuevo) ni a sus colegas en el área ejecutiva. “Hemos pasado un verano difícil y las personas que tenían que explicar las cosas no han estado acertadas. Yo entre otros, pero también en los medios de comunicación se han dicho cosas que no son verdad”, explicó.
Teniendo en cuenta que los que han salido a “explicar las cosas” han sido Jordi Mestre, vicepresidente deportivo, Albert Soler, director de deportes profesionales, y Pep Segura, mánager deportivo, parece claro por quién va el comentario. Menos Segura, todos ellos están en el punto de mira del presidente en una crisis de gobierno.
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