Con Cristiano o Morata hubiese sido otra cosa
Ausencia mayor. Las dos visitas consecutivas del Valencia y el Levante refrendan la influencia absoluta de Cristiano en este Madrid. El equipo de Zidane no fue sobrado de contenido, deslucido por la no convocatoria de Modric y la suplencia de Isco, pero le esquivó principalmente el gol. Se puede intuir una resolución diferente con el delantero portugués en el campo.
Escasa finalización. Se apreció en la cantidad de centros que no encontraron remate (sólo nueve de 33). Desfilaron Marcelo y Theo por la izquierda, vehementes y con filo en cada una de sus acciones. Tuvo que acabar Ramos de nueve en el empuje final. Un síntoma esclarecedor.
Un equipo. Gustó el Levante en el Bernabéu, estructurado con sentido táctico, disciplinado y valiente con el balón. No se achicó ante el escenario y resistió con aplomo el acoso madridista. Un bloque indiscutible que realza el mérito de Muñiz.
Despiste impropio
La desatención de Carvajal en el gol de Ivi complicó el panorama para el Madrid. Le dio espacio suficiente y perdió de vista el balón.
Proyección
Buenas maneras de Theo en su debut como titular. Se entendió con Marcelo y circuló en buena dirección por el carril izquierdo.