Carlos Sainz: "Ganar el Dakar sigue siendo mi objetivo"
El madrileño volverá a la carga en el raid más importante y asegura que quiere "ayudar a Peugeot a ganar la prueba un año más".
—De nuevo en la pomada tras la confirmación de que seguirá un año más en el Dakar con Peugeot.
—Después del Dakar del año pasado la duda estaba en seguir o no. Al final hemos decidido hacerlo un año más con un coche nuevo, mejorado, y con la responsabilidad también de tratar de ayudar a Peugeot a ganarlo un año más.
—Está claro que si acepta el reto no es para pasearse. ¿Quiere volver a ganar?
—Es obvio que cuando corres con un equipo oficial es con la intención de intentar ganar en esta carrera tan especial, como ha sido siempre desde que dejé el Mundial de Rallys.
—¿Qué tal va el nuevo coche?
—Es una evolución del anterior. Es un coche más ancho y se ha trabajado también algo en el motor. Al ser más ancho es más estable, y sobre todo en los terrenos rotos tiene menos tendencia a ponerse en dos ruedas. Hemos ido al límite del reglamento, y pensamos que es el camino bueno para mejorar la estabilidad en todos los terrenos, aunque quizás pierde un poco de agilidad en las zonas muy lentas y estrechas. Pero en general, sobre todo este año teniendo en cuenta que va a haber más dunas al empezar en Perú con tres o cuatro días de desierto, pensamos que es la estrategia adecuada.
—¿Sigue descontento con el reglamento técnico?
—No quiero entrar mucho en polémicas, pero este año la tendencia es que nos van a poner a nosotros más peso, y a los rivales se lo van a quitar y darles más recorrido de suspensión. Quieren igualar las prestaciones, pero dependerá mucho del tipo de terreno. En un camino un 4x4 siempre va a ser más rápido que nosotros y, al contrario, si te metes en terreno abierto, desierto o piso roto, es donde tenemos nosotros la ventaja.
—¿A quién teme más como rival, a Toyota o a Mini? ¿Y en su equipo, cuál es el compañero más fuerte entre cuatro gallos?
—Dependerá de quién pilote el Mini y de quien pilote el Toyota. Como me ha pasado siempre a lo largo de mi carrera deportiva, cuando corres en un equipo bueno, y Peugeot es el equipo más fuerte del Dakar, lo normal es que tengas compañeros de equipo muy buenos. Si quieres ganar el rally tienes que empezar ganando a tus compañeros de equipo.
—¿Y a cuál teme más, la regularidad de Peterhansel, la velocidad de Loeb o Despres, que cada vez va más rápido?
—Este va a ser el tercer año de Loeb, que el año pasado fue muy rápido y más consistente. Pero el Dakar es una historia diferente cada día y hay que luchar durante dos semanas. En este aspecto hay que destacar la consistencia de Peterhansel, que juega siempre a la regularidad, y Despres va a estar siempre ahí. Es un buen navegador y cada vez también tiene más experiencia y va más rápido.
—¿Cree que el Dakar va a recuperar su esencia con las etapas en Perú?
—Tiene toda la pinta. Desde luego los primeros días vamos a entrar en un Dakar con fuera de pista, desierto, dunas, y eso puede marcar ya de entrada una buena diferencia. Es importante iniciar bien el rally en la primera semana de carrera para estar en posición de luchar la segunda semana. Es muy probable que ocurran cosas desde el inicio.
—La eterna pregunta: ¿será este su último Dakar?
—Es obvio que cada año que pasa hay menos oportunidades de volver al año siguiente. Es ley de vida. Pero yo de momento me siento bien y mientras siga divirtiéndome, siga siendo competitivo y siga teniendo ganas, estaré en el Dakar. Este año se dan esas tres circunstancias: tengo un coche competitivo, tengo ganas de luchar por la victoria y me apetece y me divierte. El día que me falte alguno de esos ingredientes me quedaré en casa.
—¿Si lo vuelve a ganar se dará por satisfecho?
—Vamos a correr la carrera y luego ya veremos. No adelantemos acontecimientos. Ganar un Dakar es muy difícil, pero mi objetivo es intentar ganarlo. Luego, luego ya veremos.
