Suzuki y Sogahata amargan el adiós sevillista de Japón
El equipo de Berizzo se marcha de Japón con una derrota y malas sensaciones ante el gol y en atención defensiva.
Primera e inesperada derrota del Sevilla, que se marcha este sábado de Japón con bastantes peores sensaciones que las que logró tras derrotar por 0-2 al Cerezo Osaka. El equipo de Eduardo Berizzo cuajó unos aceptables primeros 50 minutos en los que además se puso de gol hasta en cuatro o cinco ocasiones sin que Correa (participativo y rapidísimo pero muy fallón, como el año pasado), Muriel, Montoya ni Corchia, un puñal en la derecha, fueran capaces de batir al portero del Kashima Antlers, Sogahata.
Más allá de alguna pérdida de balón en la salida como la que provocó el gol local y de desatenciones defensivas como la que propiciaron el segundo, los dos de Suzuki, lo evidente es que a este Sevilla le hace falta otro delantero de área que corone un equipo que crea juego pero al que, ya le pasó algunas veces con Sampaoli, le cuesta ver puerta con facilidad. Jovetic no parece tener ese perfil.
El Kashima salió con el ímpetu que se le conoció en el Mundial de Clubes y se acercó a la puerta de Soria con más asiduidad que peligro. Las burbujas se le acabaron a los 10 minutos para que Ganso (participativo), Pizarro y Banega recuperaran la pelota y el mando. Corchía intentaba dársela por la derecha asociándose con Muriel. Los dos pusieron en aprietos a Sohagata en la primera gran ocasión nervionense, minuto 23.
Montoya, que confirmó su mejoría respecto del año pasado, estuvo cerca de marcar en un centro chut pasada la media hora de partido. Tres minutos después, tras un magnífico movimiento de Muriel en ataque, Correa se quedaba solo ante la meta rival pero echaba fuera el primero de tres manos a mano. Justo antes del descanso el guardameta Sohagata volvía a salvar el empate sacándole al fichaje colombiano un remate a bocajarro.
Una jugada maradoniana de Correa terminó también en una rosca desviada, a poco de comenzar la segunda mitad. Soria, al que no habían chutado a puerta en 69 minutos, salvó el gol local con un mano a mano Nakamura, pero poco pudo hacer poco después en una pérdida durante a la que al Sevilla se le notó despistadísimo, con cuatro atacantes japoneses contra dos defensas. Suzuki marcó a placer (1-0, 72').
Quedó grogui el Sevilla, alterado por los cambios, durante algunos minutos, pero tuvo el empate el franco-tunecino Ben Yedder, al que amargó de nuevo Sogahata. El meta y Suzuki, que desde el banquillo fue capaz de completar un doblete en el descuento (2-0, 91'+), se convirtieron en los héroes locales además de poner en evidencia la necesidad de un killer en el regreso sevillista desde el Sol Naciente.
