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TRIBUNALES

O.J. Simpson será hombre libre después de casi 9 años

El legendario y polémico exjugador de los Buffalo Bills y San Francisco 49ers podría salir de prisión el 1 de octubre.

Ciudad de México
O.J Simpson, una leyenda de la NFL antes de la polémica
Jason Bean / Reno Gazette-JournEFE

No hubo una Bronco blanca al frente de una de las persecuciones más lentas y recordadas de la historia. No hubo un guante demasiado pequeño para la mano de un tipo que jugó football en la NFL durante 10 años. Solo una escueta sala de audiencias en la zona rural de Nevada, una videoconferencia y el mismo resultado: O.J. Simpson dejando el lugar como hombre libre.

La única diferencia del jueves con lo sucedido hace 23 años, es que Simpson sale en libertad después de pasar casi nueve años tras las rejas en el Centro Correccional de Lovelock, a donde fue sentenciado después de haber sido encontrado culpable de robo a mano armada por irrumpir junto con otros hombres en la habitación de un coleccionista de objetos deportivos para recuperar artículos que, asegura, le pertenecían.

Lejos de verse como el espectacular running back que conquistó la década de los 70, el rostro de innumerables marcas o siquiera como el detective Nordberg de “¿Y dónde está el policía?” (“Agárralo como puedas” para mis amigos en España), Simpson lució cada uno de sus 70 años en la austera sala de audiencias de Lovelock. Cabello gris, unos kilos de más y la mirada de un hombre que ha pasado los últimos nueve años de su vida viendo barrotes.

Pero eso no fue suficiente para quitarle el carisma. La cárcel quita muchas cosas, pero no la personalidad. Y Simpson podrá ser acusado de muchas cosas, pero nunca de ser un personaje aburrido. El ejemplo: Cuando una de las funcionarias de libertad condicional se confundió y dijo que su edad era de 90 años, Simpson respondió: “No, pero así me siento”.

Sí, O.J. sigue siendo capaz de adueñarse de una habitación, un tribunal o un emparrillado con una sola sonrisa. De romper el hielo incluso en los momentos más tensos. Supongo que es la experiencia de haber trabajado con Leslie Nielsen, porque hace 23 años, durante el juicio del siglo, ya dominaba el truco.

Pero también sabe bien cuándo es el momento de comportarse como lo que sigue siendo, el recluso 1027820 del sistema correccional de Nevada, quien estaba ante el panel únicamente para pedir lo que quiere cualquier hombre de 70 años, la oportunidad de pasar más tiempo con sus hijos.

Como lo hizo desde el momento en que fue enjuiciado por robo a mano armada, Simpson no puso excusas, lamentó lo sucedido y admitió que pudo haberlo manejado de otra forma. Y de paso, mostró el carisma que lo convirtió en una de las figuras más importantes de la televisión estadounidense.

“He pasado nueve años sin poner ningún tipo de excusas. Lamento que las cosas hayan salido de esa forma”, dijo en su declaración final. “No pretendía cometer un delito y pagué mi condena. Solo quiero volver con mi familia y amigos, aunque no lo tengan, tengo amigos”.

Reacción de O.J Simpson al conocer la resolución:

No en las redes sociales, donde no faltaron los memes cuando declaró que “nunca le he apuntado un arma a nadie y nunca he sido acusado de ello”.

No solo fue acusado de apuntar un arma, sino de utilizarla salvajemente para asesinar a su exesposa Nicole Brown y al amigo de ella, Ron Goldman. Penalmente fue absuelto, civilmente es culpable y debe pagar una restitución de 33 millones de dólares a los familiares.

Obviamente, Simpson no cuenta con ese monto y posiblemente nunca lo tendrá. Se estima que durante su tiempo en prisión obtuvo alrededor de 600,000 dólares de su pensión en la NFL, que por ley son intocables. Así que, nuevamente, Simpson se salió con la suya.

Así que su mayor crimen sigue siendo haber lanzado a la fama a las Kardashian y no hay tiempo suficiente en prisión para pagar ese delito.