Jarvis Landry, harto de que Tom Brady venda tanto en Miami
El receptor de los Dolphins no quiere que la camiseta del quarterback de los New England Patriots sea la más comprada en el estado de Florida.
La semana pasada se hicieron públicos ciertos datos de venta de camisetas en la NFL y uno de ellos rezaba que Tom Brady era el que más camisetas había vendido. Algo lógico y que no llama especialmente la atención. Que hablamos del mejor de la historia, el más popular del momento y, ah, sí, el actual MVP de la Super Bowl. Algo que causaba un poco más de extrañeza (tampoco mucha) es que Brady era el que más camisetas había vendido... en el estado de Florida.
El hecho es que en Florida hay tres equipos de la NFL, con lo que hay muchos jugadores candidatos a ser héroes locales que podrían estar los primeros en ese ranking y, además, los Miami Dolphins son enemigos íntimos de los New England Patriots y eso, pudiese parecer, imposibilitaría a un ídolo patriota como gran factor de marketing. Pero no.
Jarvis Landry se lo ha tomado como algo personal. El receptor de los Dolphins comparte con Odell Beckam Jr, de los New York Giants, el haber sido el jugador con más pases recibidos en sus tres primeras temporadas en la NFL y, con justicia, se ha erigido como la punta de lanza de un grupo de receptores muy excitante en la plantilla del equipo de Miami. Así que, con esas credenciales, le parece bastante mal que Brady venda más camisetas que él, que cualquiera de sus compañeros, en la propia ciudad del sur de Florida.
"Pero ¿sabes una cosa?", ha declarado Landry al Miami Herald, "eso se va a acabar en uno o dos años. Somos un equipo en crecimiento que en breve estaremos a ese nivel".
No hay que pedir tanto. Lo cierto es que a los Miami Dolphins no se les va a exigir que sean como los Patriots, que ganen anillos a tutiplén y que tengan en sus filas a una de las máximas figuras de la historia del deporte norteamericano. En lo que sí tiene razón Landry es en que, a poco que las cosas sigan su curso lógico, los Dolphins van a ser un muy buen equipo, contendiente al título, y con capacidad para movilizar a la masa de aficionados como para que estén orgullosos de comprar las camisetas del equipo de su ciudad, de su estado, y no el de los rivales declarados. Para ello, qué duda cabe, el cuerpo que el propio Landry lidera, y en el que le acompañan gente como Kenny Stills o DeVante Parker, van a ser cruciales. Y fáciles de vender en el terreno del marketing.