Ermita de Santa Lucía: rampas del 20% con el mar de fondo
La primera meta en alto de la Vuelta de 2017 se disputará en la quinta etapa, el 23 de agosto: 4 km al 8,5% de desnivel, con rampas del 20%.
La localidad costera de Alcossebre (Castellón) está presidida por una preciosa ermita blanca del siglo XVII levantada en honor a Santa Lucía y San Benito. Se encuentra ubicada en lo alto de una colina, y para llegar a ella hay que ascender 4 km por una carretera de rampas duras y explosivas, esas que la Vuelta ha convertido en seña de identidad. Por eso no extraña que fuese elegida como una de las grandes novedades de la próxima edición. Se subirá el 23 de agosto, en la quinta etapa, siendo el primero de los nueve finales en alto de la carrera.
“Una subida asfixiante en un marco espectacular”, analiza el expiloto de Fórmula 1 Roberto Merhi. El castellonense es un gran aficionado al ciclismo que no duda en enfundarse el maillot para reconocer con AS la inédita ascensión. Además, cuenta con una escolta de lujo. Dos exciclistas, ahora técnicos de la Vuelta, como su paisano Kiko García y Fernando Escartín.
“Llegar aquí es un regalo. No hay muchas posibilidades de encontrar subidas así de especiales tan cerca del mar. Deportivamente le añadirá picante a la primera semana y servirá para mostrar las bondades turísticas de esta zona”, comenta Kiko García. Una ascensión que se convirtió en la alternativa perfecta al Bartolo, un puerto muy conocido en la provincia, pero, al estar ubicado en el Parque Nacional del Desierto de Las Palmas, no permitía el paso de la competición.
Escartín, quien reconoce arriba que el trayecto se le ha hecho duro (“ya no me entreno como antes”), defiende que este tipo de finales aumentan el interés. “Recibimos críticas porque no hay demasiadas llegadas llanas. Pero lo que nos dicen los aficionados es que interesan más finales así que el típico sprint que podíamos haber hecho abajo”.
En el tercer kilómetro de ascensión se afronta el punto caliente. Una señal marca el 20% de desnivel en dos curvas entre la arboleda. Tras ellas, la vegetación se abre para mostrar el Mar Mediterráneo de fondo. “Es muy bestia, pero no es la única rampa importante”, explica Merhi.
“Las diferencias creo que serán mínimas. Aunque haya varios puertos antes, a las primeras rampas llegará un grupo importante. Lo bonito será la lucha por vencer en una llegada inédita”, indica Escartín. Y para conseguirlo, un favorito: Valverde. “Parece hecha para él”, apunta Kiko García, quien tampoco espera incidencia entre los favoritos: “En la ermita de Santa Lucía no se va a ganar la Vuelta. Pero sí se puede empezar a perderla...”.