Durant: de querer casarse con Rihanna a odiarla en seis años

El primer partido de las Finales de la NBA entre Golden State Warriors y Cleveland Cavaliers acabó con un bonito amor que contaba con seis años de antigüedad: Kevin Durant ya no ama a Rihanna. La cantante acudió al Oracle para animar a su amigo LeBron James (siempre hay complicidad cuando ambos se encuentra en una cancha) y chocó directamente con el alero al celebrar con efusividad una canasta del Rey y al gritar "¡Brick!" ('ladrillo') cuando la estrella de La Bahía lanzaba un tiro libre.

La reacción del alero fue desafiar dos veces con la mirada a Rihanna: la primera a anotar esa personal y la segunda al conseguir un triple en el último cuarto. Mirada y negación con la cabeza. "El rey sigue siendo el rey, puta", dijo la de Barbados al abandonar el Oracle. Una situación tirante y muy triste si nos remontamos a 2011.

Ese año, Durant fue preguntado en Twitter con quién quería casarse. Él contesto muy claramente: "Esa chica, Rihanna".

Un año después, el exjugador de los Thunder pidió que la artista le felicitará por su cumpleaños... y ella lo hizo sin ningún tipo de problema. Eran otros tiempos. Era un bonito amor que ha tenido su final en la soleada California.