Decepción. D esilusión. Y ante todo, frustración. Estas fueron las sensaciones que experimentaron todas las personas que seguían atentas las evoluciones de Fernando Alonso en las 500 Millas de Indianápolis cuando a falta de 21 vueltas para el final, el motor Honda de su McLaren Andretti dijo basta.
Un nuevo problema en el propulsor japonés alejaba al piloto español de lograr al menos, acabar la carrera. Como en la Fórmula 1. De nuevo Honda se interponía en el camino del éxito . McLaren y Alonso, que habían arriesgado con esta aventura americana en una temporada muy complicada, regresan a casa más tocados anímicamente.
Una situación muy difícil de asumir para Zak Brown. El CEO de McLaren no ha ocultado la decepción que ha supuesto para la escudería inglesa el abandono del bicampeón español en la Indycar por un problema en el motor Honda: "Es triste para Fernando, para todo el mundo de McLaren y Andretti. Hemos tenido unos muy dolorosos años y esperamos que este programa nos diera un buen resultado. Una nueva decepción más, como las anteriores, es algo doloroso, pero no es sorprendente".
Veremos cómo reacciona la marca nipona en la próxima carrera de la temporada de Fórmula 1 2017 en Canadá el próximo 11 de junio , ya que en principio deberían introducir la primera evolución importante en su unidad de potencia.