Gustafsson acaba con Teixeira ante los suyos y mira a Cormier

La afición de Estocolmo (Suecia) estalló en júbilo cuando Glover Teixeira cayó al suelo tras un tremendo crochet de derechas de su compatriota Alexander Gustafsson. 'Mauler' quería lucirse ante los suyos y tocar a la puerta del campeón de los semipesados. Lo hizo. La pelea prometía espectáculo y ambos lo ofrecieron, más por el sueco que por el brasileño. Eso sí, Teixeira demostró que ante todo es un guerrero y aguantó las muchas embestidas de Gustafsson. Día redondo para el luchador de Arboga, porque después de ganar pidió matrimonio a su novia ante el entregado público sueco.

El combate siguió una premisa fundamental: Gustafsson marcó los tempos. Sólo al principio Teixeira llevó la iniciativa, mandó al tapiz al luchador local y le restó aire... pero Gustafsson estaba crecido se rehizo e impuso su ley. Pegaba y se iba. A veces correteando, dejando una imagen surrealista, pero efectiva. Teixeira no se cubría bien y los upper comenzaron a memar su físico. Una y otra vez ese golpe entraba a su rostro y le iba haciendo mella.  

Pese a que ese fue el golpe que marcó el combate, Teixeira se tambaleó por primera vez en el segundo asalto por un codazo. Tiró de veteranía y resistió. La historia se repitió en el tercer asalto tras una gran combinación, pero el brasileño era una roca. Gustafsson no se precipitó, siguió haciendo su pelea y esperó su oportunidad. Teixeira salió a por él en el quinto asalto, el sueco se cubrió y vio de nuevo la autopista que tenía el brasileño entre sus brazos. Un tremendo upper dejó flotando a Teixeria, dos, tres... y un crochet, el brasileño cayó al suelo. El árbitro se metió por el medio y paró la pelea. La puerta de Cormier sonó con fuerza, Gustafsson quiere su título.