Los Knicks despiden a un ayudante cercano a Porzingis

Los Knicks siguen empeñados en avivar la hoguera. No solo no han resuelto el futuro de Carmelo Anthony, sino que parecen dispuestos a coquetear con la salida del hombre llamado a llevar el peso de la franquicia: Kristaps Porzingis. El letón acabó muy frustrado su segunda temporada en la NBA, tanto que optó por plantar a Phil Jackson y saltarse así la reunión de final de curso. Desde entonces, aunque de forma muy tenue, se ha venido especulando con la posibilidad (muy escasa, eso sí) de una posible salida a corto o medio plazo del ala-pívot. La reunión mantenida entre su hermano y agente y el presidente de operaciones (Phil Jackson) no arrojó ningún tipo de conclusión. Al menos así lo detalló Stefan Bondy.

El mismo periodista que este domingo publicaba en el 'New York Daily News' el último capítulo de este pulso entre jugador y comandante que lleva camino de convertirse en un culebrón. Según sus fuentes, los neoyorquinos han decidido no renovar el contrato del asistente Josh Longstaff, uno de los pocos supervivientes de la etapa de Derek Fisher al frente del banquillo (el mismo que ahora ocupa Jeff Hornacek).

Longstaff se encargaba del desarrollo de los jóvenes jugadores del equipo (esta última temporada trabajó mucho con Willy Hernangómez), uno de los pocos aspectos en los que los Knicks pueden sacar pecho desde el desembarco de Phil Jackson, como bien apunta Bondy. Un movimiento que no le habrá hecho ninguna gracia a Porzingis, quien se encontraba muy unido al técnico. Tanto que el pasado verano cruzó el Atlántico para colaborar con él durante sus vacaciones y para este había solicitado a la federación letona su contratación para que formara parte del staff técnico durante el próximo Eurobasket 2017. Y ahora se encuentra con que ya no le tendrá la próxima campaña en el vestuario. Más leña para oscurecer el rol de Kristaps como futuro jugador franquicia del equipo. Continuará...