Ochoa, primer mexicano que juega todos los minutos en una Liga en España
El guardameta estuvo presente con el Granada en los 38 juegos de la campaña 2016-17 algo que no consiguió ni Hugo Sánchez en su gran momento.
Histórica por lo malo, pero también por lo bueno. Lo que queda claro es que la campaña 2016-17 que está culminando será inolvidable para Guillermo Ochoa, que cerró el concurso con un impresionante total de 82 goles en contra en 38 partidos.
Con esa cifra, es de sobra conocido que Ochoa se ha convertido en el portero que más goles ha admitido en una misma temporada en la historia de la liga española, pero lo que poco se menciona es que el récord tiene que ver no sólo con la cantidad de anotaciones recibidas sino con el hecho de haber jugado todos los minutos del campeonato.
Ochoa se convirtió en el primer mexicano que logra en la historia disputar íntegramente los minutos de una temporada en la Liga española, algo que no consiguió ni Hugo Sánchez, que en torneos de 38 fechas lo máximo que llegó a jugar fueron los 36 partidos de la campaña 1988-89. Cabe aclarar que Hugo llegó a tener una temporada con más partidos disputados (41) en 1986-87, pero eso se debió a que aquel torneo constó de 44 jornadas, incluyendo 10 de una extraña liguilla.
Por haber disputado los 3420 minutos del ciclo 2016-17 con el peor equipo de la clasificación Ochoa fue severamente castigado, pero bien vale aclarar que los 82 goles admitidos no son una cifra tan extraordinaria como se piensa, ya que Granada ni siquiera es el equipo que más goles recibió en esta temporada, demérito que pertenece al Osasuna que admitió 94 tantos en contra, pero como durante el torneo los de Pamplona tuvieron hasta cuatro diferentes guardameta, ese castigo se distribuyó entre todos ellos.
Ochoa en cambio “aguantó” estóico como guardameta titular, y eso que el Granada cambió de entrenador en dos ocasiones; pese a que el hombre que lo llevó a Granada, Paco Jémez, se marchó pronto, él siguió siendo el hombre de la confianza para Lucas Alcaráz primero y Tony Adams después.
