Higuaín asalta Mónaco y la Juventus se acerca a Cardiff
El argentino firmó un doblete que pone a la Juventus más cerca de la final. Los errores en defensa del Mónaco le penalizaron. Soberbio partido de Buffon y Alves.
Trece años desde su ultima semifinal ganada en casa frente al Chelsea (3-1), el Monaco volvió al top 4 de la Champions, pero topó esta vez sobre una gran Juventus, que se impuso (0-2) gracias a un doblete de Higuain. Sin Mendy, lesionado pocas horas antes del partido, el Mónaco empezó con timidez, fallando muchos balones sencillos y estando poco concentrado atrás. Más acostumbrado a jugar estos partidos de máxima exigencia, la Juventus dominaba y Dani Alves, después de una pared con Dybala, tuvo la primer oportunidad con un chut raso que Subasic paró sin dificultad (min.10).
Poco a poco, los jóvenes monegascos tomaron confianza, volviendo a encontrar su famoso juego de pases y la velocidad que les permitió eliminar al City y al Dortmund en las rondas precedentes. Y como muchas veces en los últimos encuentros, una figura emergió en el Mónaco: Mbappé mandó, de cabeza, un primer aviso que Buffon bloqueó sin apuros (min.13) antes de adelantarse a Bonucci en carrera y obligar al portero italiano a lucirse con una gran intervención al primer palo (min.16). Tres minutos mas tarde fue su compañero de ataque, Falcao, que se elevó mas alto que Chiellini para rematar de cabeza, pero Buffon salvó de nuevo a los suyos.
Cuando más cerca parecía el gol del Mónaco, la Juventus se adelantó en el marcador. En una gran acción colectiva que empezó en los pies de Buffon, Higuain lanzó a Dani Alves en la banda derecha que le devolvió la pelota de tacón para el remate sin control del exjugador del Madrid (min.29). Con este tanto, el delantero argentino hacía callar las criticas que le reprochaban su falta de acierto en las citas importantes, con solo dos goles en 24 partidos de eliminación directa en Champions.
Este tanto encajado fue un jaro de agua fría para los de Jardim que volvieron a dudar de su fútbol, estrellándose sobre la muralla defensiva italiana y sus dos goles encajados en toda la competición.
En el inicio de la segunda parte, sin embargo, una brecha hizo dudar a la defensa de la Juve, cuando un balón mal despejado llegó a los pies de Bernardo Silva, que lanzó rápidamente a Falcao y éste envió un chut demasiado flojo que no inquietó a Buffon (min.47). Siete minutos después, en un córner de Lemar, el Mónaco pidió también falta de Chiellini sobre Bakayoko en el área, pero Mateu Lahoz no pito penalti.
Y como en la primera parte, cuando el Mónaco se mostraba peligroso, un contragolpe de la Juve cambió el rumbo del partido. A la recuperación de un balón perdido por Bakayoko, Dybala lanzó a Dani Alves en la banda derecha, el brasileño centró para Higuain, que marcó con la zurda y firmó un doblete que abría la puerta de la final a los de Allegri (0-2, min.59).
Con el animo muy tocado después de este segundo tanto encajado, el Mónaco, muy cansado físicamente, no encontraba soluciones para poner en dificultad a un equipo que sigue sin encajar ningún gol desde los octavos de final. En la recta final del partido, Jardim hizo entrar a la dupla Germain-Joao Moutinho y su apuesta fue casi decisiva en el minuto 92. A la recepción de un tiro libre del portugués, el exdelantero del Niza remató de cabeza, pero Buffon fue otra vez infranqueable y despejó a córner esa ultima posibilidad con una mano prodigiosa.
Con esta victoria fuera de casa, la Juve tiene un pie en la final de Cardiff. El Monaco deberá mostrar mucho mas cosas dentro de una semana para esperar un milagro.
