Los equipos de la NFL no castigan ni el dopaje ni la violencia
El Draft de la liga de football ha dejado claro que, pese a los esfuerzos desde las oficinas centrales, las franquicias sólo se preocupan del talento.Raiders vs Patriotas en vivo online
Si algo ha demostrado este Draft de la NFL es que los equipos, las franquicias, lo que les preocupa de verdad es ganar, acumular talento y tirar para adelante a nivel competitivo aunque por el camino quede hecha jirones la imagen general que la liga quiere trasladar. Los esfuerzos de las oficinas del comisionado, Roger Goodell pueden realizar todas las campañas que quieran contra el dopaje y contra la violencia fuera de los terrenos de juego que, al final, el talento acaba imponiéndose a la apariencia.
Y es que en la NFL hay un problema entre lo que quieren vender, en lo que quieren convertirse, y a realidad de que lo que cuenta, al final del día, es ganar. Y ganar siempre que se pueda. Se hacen campañas publicitarias, se sanciona de manera ejemplar a los que se saltan las normas con las sustancias prohibidas, se imponen sanciones que no pocas veces van más allá de la mismísima justicia de los tribunales y, aún así, los jugadores con problemas pero mucho talento siguen teniendo sus oportunidades en el Draft. El riesgo merece la pena.
Controles antidopaje
Dos jugadores fallaron los controles antidopaje en la Combine de la NFL. Ambos aportaron muestras diluidas y ambos aseguraron que fue porque bebieron demasiada agua. Pero también puede ser porque quisieran enmascarar alguna sustancia y, por lo tanto, entran en la liga en el protocolo de positivos. Es decir, a la próxima la sanción será contundente y el equipo que los tenga en la plantilla tendrá que pagar las consecuencia.
Estos dos jugadores eran el linebacker de la universidad de Alabama Reuben Foster y el safety de la de Muchigan Jabrill Peppers.
Pues bien, los dos han sido primeras rondas del Draft. Es cierto que Foster fue elegido en la parte final de esa primera ronda cuando es un talento top diez, pero da la sensación de que su caída ha tenido más que ver con dudas sobre su físico, en concreto su hombro, que por el tema del dopaje. De hecho, Peppers ha sido elegido hasta un poco antes de lo previsto.
Violencia machista
Más peliagudo es aún el tema de la violencia contra las mujeres. Varios jugadores entraban en el proceso con señales rojas en su comportamiento. Algunos de ellos ya condenados, otros siendo sospechosos y algunos más con episodios dudosos, aunque es muy justo no sacar conclusiones precipitadas en estos últimos.
Lo que es seguro es que la NFL hubiese estado encantada de no tener que lidiar con este tipo de problemas y que sus equipos pasaran de los más conflictivos en el Draft. Tan seguro como eso es que sus sueños, sueños son, porque los equipos se la han vuelto a jugar.
Joe Mixon fue condenado por agredir a una chica en un bar. Además, en su caso hay un vídeo que prueba el hecho. En su descargo, que cumplió pena, que estuvo sancionado un año en la universidad de Oklahoma y que ha mostrado arrepentimiento, contricción y que es un hombre bueno. Ya veremos, pero el caso es que es una segunda ronda del Draft de los Cincinnati Bengals.
Gareon Conley fue acusado de agresión sexual dos días antes del Draft. La historia no está nada clara, vaya eso por delante, pero los Oakand Raiders decidieron que ésta no les iba a impedir elegirlo nada menos que en primera ronda. Conley cree ser presa de una trampa pues la supuesta agresión fue hace más de un mes y apareció justo antes de todo el proceso de selección; la policía no le ha detenido y todos los equipos interesados gastaron muchas horas con él para escucharle. Con los Raiders, en concreto, ocho horas en las que incluso pasó la prueba del polígrafo.
Jourdan Lewis está acusado de violencia doméstica: tercera ronda de los Dallas Cowboys. Caleb Brantley dejó a una chica inconsciente de un puñetazo y le saltó un diente: sexta ronda por parte de los Cleveland Browns. DeDe Westbrook ha sido acusado dos veces (nunca condenado) de violencia por la madre de su hijo: cuarta ronda de los Jacksonville Jaguars.
Y podría seguir. Si los cargos se consuman, los equipos habrán perdido una ronda del Draft. Si tienen otro problema de sustancias o con la justicia, Roger Goodell caerá sobre ellos con todo el poder de la NFL y serán juguetes rotos. A las franquicias, por lo que se ve, les compensa el riesgo.