Trubisky, abucheado antes de dar su primer pase con los Bears
El quarterback recién elegido en el pick 2 del draft de la NFL no ha empezado con buen pie con la afición de Chicago.
Hay aspectos que rodean al mundo del deporte profesional que son indescifrables o al menos lo son para mí. Poneos en situación. Durante el sexto encuentro de la eliminatoria de playoffs de la NBA que enfrentan a los Chicago Bulls y a Boston Celtics, con la serie 3-2 a favor de los visitantes y, con la intención de agradar al gran público, a la que puede ser una porción significativa de la afición de los Bears de cara al nuevo año en la NFL, se nos presenta a Mitch Trubisky durante un tiempo muerto de la segunda mitad cortesía de la mascota Benny the Bull.
Y le abuchean.
La flamante elección con el pick 2 del draft de la NFL, que todavía se está celebrando recibe una inigualable declaración de amor por parte de los presentes.
Todo esto, teniendo en cuenta que no ha dado su primer pase con los Chicago Bears y, ni mucho menos, ha sumado su primera (que no serán pocas) intercepción en su carrera en el football profesional.
Enormes críticas
Quizás para entender lo que sucedió anoche en el United Center de la ciudad del viento, hay que ponernos en situación y es que no se critica como tal la figura de Trubisky, cuyo talento está fuera de toda duda y que llegó a incluso a ser valorado como el primer pick del draft por los Cleveland Browns antes de que el sentido común imperase en el ‘war room’ del equipo y se escogiese al talento supremo de la cita, como fue Myles Garrett.
No, la cuestión es que para subir del tercer al segundo puesto e intercambiar su elección con San Francisco 49ers, los Bears cedieron su tercera y cuarta ronda de este draft más otra tercera de cara al año que viene.
Recordemos, todo esto para subir una posición.
Y todo ello por un jugador que sólo actuó como titular en 13 ocasiones en la temporada de college y del que no se espera que lo sea en la próxima campaña de la NFL.
Puede que las críticas estén justificadas por el alto precio, pero Mitch Trubisky no es el culpable de la situación ni fue el que dio ese potosí para subir un puesto.
Definitivamente, el quarterback de North Carolina y la afición de Chicago no han empezado con buen pie, pero seguro que les ofrecerá grandes tardes (y noches) de gloria.
O por eso están suspirando después de lo que han dado a cambio.
¡Menos mal que al menos tiene el cariño de Benny!