Zidane rectifica con Asensio

Marco Asensio se ha coronado en abril, mes alpino donde el Real Madrid ha jugado ante el Atlético, Bayern (dos partidos) o Barça y él ha dejado actuaciones que son perlas. Este brillo del balear ha terminado por convencer a Zidane, que en febrero le dejó sin jugar ni un solo minuto (se quedó fuera de la lista ante Osasuna, Nápoles, Valencia y Villarreal y no le utilizó ni ante Espanyol ni Las Palmas) pero que en este mes de abril le ha hecho ser el 11º jugador con más minutos del equipo, por delante de Isco (362’), Lucas Vázquez (318’), James (267’) o Morata (258’). También ha jugado menos Bale, aunque en su caso sólo por la lesión que sufrió en el sóleo derecho ante el Bayern (minuto 59) y que le hizo perderse los partidos ante Sporting y Bayern. De haber estado sano, el galés habría sido más utilizado en ese empeño del técnico de alinearle esté como esté físicamente (le puso como titular en el Clásico sin estar bien físicamente y volvió a romperse en el sóleo izquierdo).

Zidane trazó un plan de rotaciones en este mes de abril cargado de partidos y Asensio ha aprovechado al máximo las oportunidades que le ha dado el entrenador, que ha terminado por rendirse a la evidencia. En las tres grandes citas donde jugó, respondió: en la ida de los cuartos de Champions ante el Bayern asistió a Cristiano, en la vuelta cerró la eliminatoria con un golazo y en el Clásico fue el mejor del Madrid, sustituyendo al lesionado Bale, junto a Marcelo. Con 21 años, Asensio ha demostrado que no le pesa la camiseta: ha marcado nueve goles y ha dado tres asistencias en los 1.695 minutos que ha jugado. El Madrid y Zidane ya tienen decidido darle mucho más protagonismo la próxima temporada (el técnico ha pedido que salga James), pero su momento se ha adelantado y ya está siendo una pieza clave en esta recta final de temporada.

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El mes de Asensio

Tras comenzar abril sin jugar ante el Alavés, la perla balear jugó 90’ ante el Leganés (2-4) y salió por la puerta grande. Estuvo imponente: dio la asistencia del 0-1 y desplegó su exquisito manejo de balón, visión y potencia en la carrera. Zidane le descartó en el derbi ante el Atlético, pero en el siguiente partido, en una plaza de primera como el Allianz Arena, se consagró. Fue el primer cambio elegido por el entrenador marsellés. Le escogió para suplir al lesionado Bale (59’) y su entrada le sentó al Madrid como un guante. El partido iba 1-1 y fue clave a la hora de robustecer el centro del campo. Sus números hablan. Ante el Bayern acertó 21 de los 23 pases que intentó (el 91,3%) y le puso un centro perfecto a Cristiano para decantar el duelo.

Con Bale en la enfermería, Zidane volvió a apostar por él en El Molinón (jugó 90’), donde Isco ocupó la escena pero Asensio volvió a destacar. Como ante el Bayern, en la vuelta de cuartos de Champions. Fue de nuevo el primer hombre que salió desde el banquillo (minuto 64) y dejó otra joya, el 4-2, que abrochaba el pase a semifinales del Madrid. Junto con Cristiano (hat-trick), fue el hombre del partido. Cinco días después, en el Clásico ante el Barça, no se bajó de la cresta de la ola. Volvió a ser el primer cambio elegido por Zidane. Le dio entrada, como sucedió en el Allianz, para sustituir al lesionado Bale, y dejó en evidencia al galés. Asensio maravilló: fue una pesadilla para Jordi Alba, agitó el ataque y sólo le faltó el remate. El Madrid, que acabó el partido con diez, perdió 2-3 pero el balear volvió a lucir. Su última exhibición la dio ante el Depor. Fue titular en un partido donde Zizou optó por la llamada ‘segunda unidad’ y deslumbró como pareja perfecta de Isco. Asensio es oro y Zidane, tras rectificar, ya le está sacando brillo.

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