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ROCK 'N' ROLL MADRID MARATÓN

Dida y Chepkanan ganan una Maratón de Madrid de oro

El etiope venció con un tiempo de 2h:10:16 a su compatriota Mekonen y al keniano Kipkoech. Carles Castillejo terminó séptimo (2h:15:05). En la prueba femenina se impuso la keniana en 2h:33:55.

Madrid
Dida y Chepkanan ganan una Maratón de Madrid de oro
Javier LizónEFE

El etiope Bonsa Dida y la keniana Elizabeth Chepkanan han sido los ganadores de la EDP Rock 'n' Roll Madrid Maratón & 1/2 en el 40 aniversario de la prueba que estrenaba la categoría oro de la IAAF. Con una organización impecable y bajo el sol que proporcionó una temperatura ideal de inicio (después subió a 20º) en la capital de España, alrededor de 35.800 corredores (nuevo récord) de 108 países disfrutaron de las tres carreras amenizadas con actuaciones de bandas de rock: Maratón, Media Maratón y 10 km. Por las calles pobladas de espectadores transitaron los atletas desde la salida de Cibeles hasta la fantástica meta situada en el Parque del Retiro, después de recorrer las principales arterias y pasar por los monumentos emblemáticos de la ciudad (Castellana, Plaza de Castilla, Bravo Murillo, Palacio Real, Parque del Oeste, Plaza de España, Gran Vía...).

Bonsa Dida, de 22 años y décimo en los Mundiales de cross de Kampala 2017, fue el vencedor de la maratón en categoría masculina. Lo hizo rompiendo la hegemonía keniana, que duraba ya en Madrid siete años, y con marca personal (2h:10:16) tras irse en solitario sobre el kilómetro 36 después de haber formado parte de un grupo de diez corredores que se habían destacado y que compartieron la cabeza a partir del kilómetro cinco. El ritmo, marcado por varias liebres contratadas por los organizadores, fue infernal desde el principio, con tiempos de paso por debajo de las previsiones para que se batiera el récord de la prueba (2h:09:15): -7" a los 5 km, -26" a los 10, -15" a los 15, -6" a los 20... Pero en la segunda parte, más dura y con largas cuestas como la de Acacias, la cadencia bajó. Belete Mekonen, también etiope, superó en los últimos metros a Ronal Kipkoech para entrar segundo tras Dida. Y el español Carles Castillejo, magnífico, no se cebó con el paso de los líderes y llegó séptimo y muy sonriente en su despedida como maratoniano. Su crono, 2h:15.05.

En la prueba femenina, que marchó a un ritmo discreto y que fue menos impetuosa y más estratégica que la masculina, venció la keniana de 34 años Elizabeth Chepkanan, que ya atesora cinco victorias en maratones, en 2:33:55, por delante de su compatriota Joan Jepchirchir y de la etiope Bedatu Hirpa. Chepkanan se escapó a 10 km de la llegada con el ritmo que le marcó la liebre.

Mucho nivel en la Media Maratón

En la Media Maratón masculina, Joseph Kiprono, de Kenia, se impuso con un potente ataque a kilómetro y medio de la llegada y un tiempo de 1h:01:47, el mejor logrado en la capital. Le siguieron Samuel Ndiritu (Kenia) y Ben Chelimo (Uganda). Fue la carrera más rápida de esta distancia en Madrid con cuatro corredores por debajo de 1h:02. En féminas, la ganadora fue la atleta de Bahréin, aunque nacida en Etiopía, Tejitu Daba, finalista en los 5.000 m de los Juegos de Londres 2012, con un registro de 1h:11:29. Por detrás llegaron las españolas Aroa Merino y Vanessa Veiga.

En los 10 km, Carlos Mayo, Iván Fernández y Sergio Salinero coparon el podio masculino, y el femenino lo formaron Mélanie Doutart, Jimena Martín y Laura Serres.

Vicente Yángüez, 'El Chano'.
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Vicente Yángüez, 'El Chano'.

El Chano, de banderillero a ganar en Madrid

Vicente Yangüez, conocido como El Chano, repitió victoria ayer en la Maratón de Madrid en la categoría Hand bike. En tiempos frecuentaba las carreras populares, pero su amor era la tauromaquia, en la que ejercía de banderillero. Todo se truncó el 13 de julio de 2012, en Ávila, cuando un novillo le produjo una gravísima lesión vertebral que le relegó a una silla de ruedas y quebró su carrera en las plazas de toros. Fue atendido en el Hospital de Parapléjicos de Toledo. Pero no se rindió. Quiso competir como paralímpico en los Juegos de Río, pero no logró clasificarse. Pero tampoco se rindió. Galopa a lomos de su silla muy velozmente. Y gana. —Ángel Cruz