MEMPHIS GRIZZLIES 104-SAN ANTONIO SPURS 96
Marc se lleva el 22º duelo entre los Gasol y ya está 10-12 con Pau
Los Memphis Grizzlies vencieron por segunda vez esta temporada a los San Antonio Spurs y aseguran prácticamente el Playoffs con 12 partidos por delante.
Horas antes del partido, Pau Gasol regaló a su hermano Marc una patata con su imagen (una nueva moda NBA) y durante el calentamiento, saludos, risas y complicidad. Luego llegó el salto inicial con el pívot de Memphis Grizzlies de titular y el jugador de San Antonio Spurs en el banquillo, con su nuevo rol de sexto hombre, y se acabó el amor fraternal. Nunca ha existido cuando se enfrentan. Ni en los entrenamientos. Hay intensidad y una competitividad casi enfermiza que se demostró en este 22º duelo entre ambos en la Liga norteamericana. Y por décima ocasión en su carrera, el mediano de la familia se llevó un duelo (104-96) rocoso que se decidió a 150 segundos del final con los Gasol como actores principales.
Ese minuto 2:30 del último cuarto fue la soga que colgó a los Spurs en Memphis. Fue, además, el ejemplo de esa rivalidad. Con 95-87, Marc se liberó en la parte izquierda del perímetro tras un pequeño encontronazo con Pau y recibió el balón. El mayor se quejó de un golpe en la cara dando un paso atrás liberador para su pareja de baile, que lo aprovechó con Vince Carter de pantalla. Fueron segundos y metros escasos, pero determinantes: el center se lanzó a la canasta, ante y contra toda la defensa spur, y anotó tras recibir un falta de su hermano: 2+1. 98-87. La sentencia para San Antonio, que enlaza dos derrotas seguidas ante los de Tennessee (aún no los ha ganado esta campaña), dos en los dos últimos encuentros y ya está, de nuevo, a dos partidos y medio de los Golden State Warriors, líderes de la Conferencia Oeste. Memphis, por su parte, se sitúa en el séptimo puesto con los Playoffs en el bolsillo: a falta de 12 duelos tiene una diferencia de +8 sobre los Portland Trail Blazers, novenos.
"Son un equipo campeón. Fue una buena prueba para nosotros", comentó en televisión Zach Randolph (18 puntos), tras un duelo en el que los suyos sumaron la cuarta victoria consecutiva con el mantra del Grit and Grind: defensa, más defensa y un poco más defensa de propina. Dejaron a los de Gregg Popovich en 96 puntos y un 44% en tiros de campo. Es el cuarto partido que los Grizzlies hacen que su rival finalicen por debajo de los 100 (93 de media), cuando en las cinco derrotas seguidas que abrieron marzo sufrieron 112 tantos de media. "Estamos jugando con un sentido de urgencia defensiva como no lo habíamos hecho en toda la temporada. Es casi como si hubiéramos encendido el interruptor de los Playoffs", señaló Mike Conley, máximo anotador de los suyos con 19 puntos. Marc hizo 16 con 7 asistencias y 5 rebotes.
La asfixia defensiva se hizo patente en la efectividad desde el perímetro de los texanos (32,1%). No vieron aro desde el triple hasta el comienzo del segundo cuarto, cuando Patty Mills logró el primero después de nueve errores previos. Aunque eso no limitó el esfuerzo de los Spurs. Abrieron los segundos 12 minutos con un parcial 4-16 (del 29-18 al 33-34) que inició y concluyó el base australiano de tres. Pero los errores (15 pérdidas), condenaron, una y otra vez, a San Antonio a vivir a remolque a pesar del 51º partido de 20 puntos de Kawhi Leonard (22) y los 21 del renacido LaMarcus Aldridge. Con 89-86, los métodos de supervivencia de Pops y los suyos se agotaron. No hubo ni agua ni comida después de los seis puntos seguidos de Conley y la famosa jugada entre los hermanos Gasol. Fue el fin de un duelo al que le restan dos episodios de Regular Season y, si la clasificación concluye así, un mínimo de cuatro y un máximo de siete en los Playoffs por el título.