“Agrilus planipennis” o la mayor amenaza para ele béisbol
De todos los peligros que acechan al pasatiempo nacional, el más pequeño ha resultado ser el más peligroso para el porvenir de este deporte.
Cuando se habla del futuro del béisbol, la mayoría de los debates tratan sobre cómo hacer este deporte más atractivo a los jóvenes, sobre la duración, a veces eterna, de los partidos, reducir la zona de strike… variaciones sujetas a la mano del ser humano en busca de la mejora del juego. Sin embargo, un peligro ha pasado desapercibido y es la mayor amenaza para el juego.
Uno de los sonidos más característico del pasatiempo nacional es cuando se golpea la bola con el bate de madera. Louisville Slugger, proveedor oficial de la liga durante más de cien años, ha realizado sus bates con madera de fresno blanco, todavía hoy utilizado por el 25% de los jugadores, procedente de los bosques del norte de Pennsylvania y Nueva York.Y es ahí donde está el verdadero peligro, en el árbol del que procede la madera.
En el año 2002 fue localizado en el sureste de Michigan y en Ontario, Canadá, ejemplares de “Agrilus planipennis”, barrenador esmeralda del fresno, para muchos científicos el insecto más destructivo que ha entrado en América. Este insecto, de color verde esmeralda y del tamaño de una almendra, se alimenta de las hojas de fresno blanco, pero el verdadero problema tiene lugar cuando se reproduce. Las hembras colocan sus huevos entre las grietas del tronco y cuando eclosionan, las larvas se comen el tejido del árbol, produciendo su muerte en tres años.
El aumento de las temperaturas ha provocado que el desarrollo de larva a adulto se realice en la mitad de tiempo y ya hay 25 estados afectados por este insecto. Se calcula que ha producido la muerte de miles de árboles y hace poco más de un lustro, fue localizado a escasos 150 kilómetros de los bosques que nutren a Louisville Slugger. Esta invasión se ha tratado de detener con pesticidas, algo posible en una ciudad pero inviable en un bosque frondoso, liberando avispas que matan a los barrenadores, pero el futuro no parece muy halagüeño para el fresno blanco.
Se habla incluso de devastación
Desde que Barry Bonds batió el record de home runs con un bate de arce en una temporada, muchos jugadores han optado por este tipo de madera. El problema es que el arce tampoco está exento de peligro, ya que en su caso es el “Anoplophora glabripennis”, escarabajo asiático de cuernos largos, el que amenaza al árbol nacional canadiense, aunque en este caso las autoridades son más optimistas a la hora de poder controlar esta plaga.
Ante este panorama, la MLB junto al Laboratorio de Servicios y Productos Forestales han desarrollado nuevos protocolos para poder usar otro tipo de maderas. En esos protocolos se estudia la densidad de la madera, cómo de rectilíneas son sus fibras y otras características por el estilo. De estos estudios se ha obtenido que tanto el abedul amarillo, utilizado ya por un 5% de los jugadores, como la haya europea son alternativas perfectamente viables.
Algunos científicos piensan que si los jugadores volviesen a los bates de fresno, no tendrían la oportunidad de batir el record de Barry Bonds y además consideran, que con las alternativas encontradas, ya está solucionado el problema.
Sin embargo, otros piensan que la desaparición del bate de fresno blanco no sólo lo sentirán en el futuro las generaciones venideras, sino que es la pérdida de un elemento incrustado en la historia y esencia de la nación.