Benítez, la nueva joya de Chivas, pensó en regresar a Culiacán

Es la nueva joya del Guadalajara… y estuvo a punto de no serlo. Michelle Benítez debutó en Primera División el sábado pasado. Ingresó de cambio por Alan Pulido, al minuto 73 del partido que el Rebaño Sagrado ganó por 2-0 ante Toluca. En ese momento, cumplió su sueño. Pero antes, estuvo a punto de renunciar a él.

Nació en Culiacán, Sinaloa. El 12 de febrero cumplió 21 años. Fue detectado por Héctor Real, quien lo trajo a la Perla Tapatía. Se integró a las fuerzas básicas de Chivas en 2013. Por un momento, pensó en regresar. La nostalgia por su tierra y, sobre todo, por la familia, le llamaba.

“Sí, porque extrañaba a mi familia. Tengo ‘mamitis’ y sí pensé en regresarme, pero el sueño es más. Mi mamá, de hecho, fue quien me dijo que siguiera luchando por mis sueños, que por eso estaba lejos de mi familia y que muy pronto íbamos a estar juntos”, relata.

El sábado, se cumplió el primer objetivo, al presentarse en el máximo circuito. Pero el camino ha sido complicado. “Sí, llegar a Chivas fue muy duro. En Tercera División no jugaba. Gracias a Dios se me abrió la oportunidad de venir al mejor equipo de México. Agradezco a la institución porque me dio la oportunidad de estar aquí.

Su familia no pudo estar en el Estadio Chivas para presenciar el debut en Primera División. Michelle Benítez no imaginaba ir a la banca. No hubo tiempo de planear el viaje de los suyos. Pero cuenta que tanto su padre como su madre lloraron al felicitarlo por teléfono, después del encuentro.

“Mi familia no pudo estar aquí, no pudieron venir. Después, ellos me hablaron y me felicitaron. Me dijeron que están muy orgullosos de mí y que siguiera echándole ganas a los entrenamientos. Pero sí estuve con mis compañeros, Edson (Torres), Mauro (Contreras), los de cantera que me apoyaron en todo momento y me dieron consejos. Fue una experiencia muy linda”, detalla el joven rojiblanco.

Todo el sacrificio, asegura, vale la pena. Su ídolo es Ramón Morales. Y ahora desea seguir sus pasos. Consolidarse con el Club Deportivo Guadalajara. Hacer una carrera larga en Primera División. Michelle Benítez sabe que el equipo tiene sembradas importantes esperanzas en él.

“Vale la pena el sacrificio porque este equipo tiene eso, que se fija en los jóvenes mexicanos y están al pendiente de ti. Trata de darte lo mejor y debes agradecerle en la cancha. Es mi sueño lograr consolidarme con este equipo y seguir trabajando para ganar minutos”, sentencia.

En Copa MX ya marcó un gol. Es una de las joyas del Rebaño Sagrado. Uno de los jóvenes nacionales que levantan la mano. Y confía en que pronto, otros clubes también brindarán mayores espacios. “Hay mucho talento mexicano. Espero algún día le den más importancia a los jóvenes mexicanos, como lo hace este equipo. Gracias a Dios tengo la oportunidad de estar entre puros mexicanos”, concluye Michelle Benítez.

Narración Chivas vs Correcaminos | Copa MX