El estadio de los Vikings es una trampa mortal para pájaros
Los 61.000 metros cuadrados de cristal trasparente del US Bank Stadium de Minneapolis son invisibles para las aves, que se estrellan de muerte contra su superficie.
Si los Minnesota Vikings no tuvieran suficientes problemas, se han encontrado con uno nuevo aunque, por lo que parece, previsto por algunos especialistas. Su nuevo y flamante estadio, el US Bank Stadium de Minneapolis, es una trampa mortal para pájaros.
Y en este caso no nos referimos a los Cardinals, Eagles, Falcons, Ravens o Seahawks, sudando tinta para imponerse en el fortín de los Vikings.
Según se ha publicado en un informe, sus 61.000 metros cuadrados de cristal transparente son invisibles para las aves, que “chocan contra él como si estuvieran en una película de Hitchcock”, como explica literalmente el periódico local CityPages. El estadio, que costó unos 1.100 millones de dólares, en gran parte pagados por los contribuyentes de Minnesota, está ahora en el centro de la polémica y comienzan a ser multitud las asociaciones que reclaman que se busque una solución para hacer sus paredes de vidrio distinguibles para las aves.
Durante 11 semanas, un grupo de voluntarios ha recorrido el exterior del estadio cada día durante dos horas, entre las 6 y las 8 de la mañana, para buscar animales accidentados. En ese tiempo encontraron 60 aves muertas y 14 aturdidas en el suelo. Entre las víctimas había 21 gorriones, 9 colibríes y un ‘copo de nieve’ que, por lo que parece, es un ave difícil de ver y extraña en las ciudades. Según esas cifras, y asumiendo que muchas otras aves son retiradas por los empleados de las instalaciones, o incluso por otros animales carroñeros, se calcula que al año pueden morir hasta 500 aves al chocar contra el US Bank Stadium, lo que convertiría la instalación en la estructura más letal para las aves de todo Minnesota.
En 2014, durante la construcción del estadio, varias asociaciones advirtieron de que el cristal trasparente del estadio sería una trampa moral para las aves, porque, además, el estadio está situado en medio del ‘Mississippi Flyway’, una de las rutas más importantes de migración de aves de EEUU que se extiende desde Canadá hasta América del sur.
La ‘Autoridad de Instalaciones Deportivas de Minnesota’ responsable del estadio, ha decidido, junto a la franquicia de los Vikings, hacer un estudio durante tres años que costará unos 300.000 dólares. Ese estudio medirá el impacto real del problema y cuáles son las medidas que se deben tomar. Sin embargo, las asociaciones animalistas se quejan de que el impacto del problema ya es evidente sin necesidad de nuevos estudios y que es un error no tomar medidas por ahora cuando es un asunto que ya se ha resuelto con éxito en otros lugares. En el Javits Center de Manhattan se cambió el vidrio original por otro más visible cuando se detectó el mismo problema con las aves. Desde su instalación, las colisiones de pájaros con el edificio neoyorkino se redujeron en un 90%.