Estos son los 12 protagonistas de la Conferencia Oeste
Stephen Curry (Golden State Warriors): dos veces MVP de la NBA, una por unanimidad (algo histórico) y ambas de forma consecutiva. Con eso bastaría para describir a uno de los mejores jugadores del mundo, al base que ha revolucionado la forma de entender este deporte con cuatro temporadas seguidas por encima de los 250 triples y una de ellas con 402, récord de siempre en la Liga norteamericana. Fue la clave de los Warriors del 73-9, el mejor balance de la historia, y este curso tiene claro su objetivo: el anillo no puede escaparse de nuevo.
Foto:@NBAAllStar
James Harden (Houston Rockets): ¿este es su año? Este es su año. El jugador de Houston Rockets se ha reconvertido en base para controlarlo todo y el resultado es excepcional, a pesar de las dudas que generaba esa decisión. Segundo máximo anotador de la temporada y primero en asistencias, su labor ha situado a la franquicia texana en el tercer puesto de la Conferencia Oeste y es difícil que el MVP se le escape, con permiso de un Westbrook que se ha quedado fuera del quinteto titular a pesar de tener la misma media que Curry y Harden. El voto popular deshizo esa igualdad.
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Kawhi Leonard (San Antonio Spurs): el hombre callado. El hombre de las manos enormes. El hombre de la defensa incansable. Todo eso y más es el alero de San Antonio Spurs. Tras la retirada de Tim Duncan y el declive lógico de Tony Parker y Manu Ginóbili, Leonard se ha erigido como el jugador franquicia de los texanos. Ojito derecho de Gregg Popovich, ha multiplicado sus armas con el paso de los años, sin perder las que traía de serie. Un superclase.
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Kevin Durant (Golden State Warriors): el alero disfruta de una nueva vida en Golden State Warriors tras nueve temporadas en Oklahoma City Thunder (una de ellas como Seattle SuperSonics). Tanto su deseo como el de la franquicia de La Bahía es el anillo (sería el primero para él y el segundo para Curry y compañía) y la unión entre ambos es la respuesta más adecuada para hacer frente a LeBron James y los Cavaliers. Anotador de raza, es ya uno de las grandes en la historia de la NBA con un MVP a sus espaldas.
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Anthony Davis (New Orleans Pelicans): representará a la franquicia en el All Star de su ciudad. Los New Orleans Pelicans tienen una fe inquebrantable en el pívot, que ha dado un salto cuantitativo en su media de puntos por partido. Tirador exquisito a media distancia, no le hace ascos ni a la zona ni a la línea de tres puntos. Su único lunar: las terribles campañas que pasa en un equipo que ha zozobrado en la parte media-baja del Oeste desde que llegó, aunque este curso el octavo puesto de la Conferencia está barato... ¿Llegará sus segundos Playoffs?
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Marc Gasol (Memphis Grizzlies). Será su tercer Partido de las Estrellas tras los de 2012 y 2015 (en éste protagonizó un salto inicial junto a su hermano Pau para la historia). Si en 2015 fue elegido el mejor pívot de la NBA, en éste podría repetir. Promedia 20,6 puntos (su tope), 6,1 rebotes y 4,2 asistencias (también récord). Está completamente recuperado de la lesión que le apartó de las pistas el febrero pasado y le mantuvo fuera de ellas ocho meses. Llega tras firmar su tope anotador de siempre (42 tantos).
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Klay Thompson (Golden State Warriors). Otro que ha sido fijo los dos últimos años. La mitad de los Splahs Brothers promedia más de 20 puntos este curso (21,1) y hace unos días acabó con 7/9 desde la línea de tres puntos. Esta temporada ha encestado cinco o más triples en nueve encuentros.
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Russell Westbrook (Oklahoma City Thunder). No podía faltar el MVP de los últimos dos Partidos de las Estrellas. Sexto All Star para un jugador que lleva ya esta temporada 23 triples-dobles y es el máximo anotador de la NBA (30,7 puntos). En 2015 también fue reserva pero acabó con 41 puntos: se quedó a uno del récord de Chamberlain (1962), pero sí se convirtió en el mejor hasta el descanso (27).
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DeMarcus Cousins (Sacramento Kings). Dejando a un lado su carácter, es uno de los pívots más dominantes de la NBA. Será su tercer Partido de las Estrellas (estuvo en 2015 y 2016). Promedia doble-doble (28 tantos y 10,3 rebotes), con su tope anotador de siempre.
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Draymond Green (Golden State). Se estrenó en la cita del año pasado (4 puntos y 5 rebotes en 12 minutos). Importantísimo en los Warriors (¿perdieron el anillo por su suspensión?), con casi un triple-doble de promedio: 10,7 tantos, 8,5 rebotes y 7,5 asistencias.
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Gordon Hayward (Utah Jazz). Los Jazz son una de las franquicias que más ha mejorado en los últimos años. Quintos en el Oeste podrían regresar a los playoffs cinco años después. Y parte de culpa la tiene Hayward. El alero promedia 21,8 puntos y 5,7 rebotes este curso: sus mejores números de siempre.
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DeAndre Jordan (Los Ángeles Clippers). El curso pasado acabó como el mejor pívot de la NBA, pero ha tenido que ser éste en el que se estrene en el All Star. Una temporada más sigue con dobles figuras de media: 12,5 puntos y 14 rebotes (el mejor reboteador de la NBA). También lo logró los últimos tres cursos.
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