El Benfica ganó por un valioso 1-0 al Borussia de Dortmund, que falló numerosas de gol, entre ellas un penalti. No fue el día de Aubameyang y sí el del portero del equipo portugués, el brasileño Ederson, que paró todo lo que fue entre los palos.
Pero gana quien marca, y ese fue el Benfica, a los tres minutos de la reanudación, y en un córner. Hace tiempo que los equipo alemanes dejaron de ser murallas aéreas, ahora son incluso débiles, como demostró primero Luisão, que se adelantó a los defensa, y luego Mitroglou que aprovechó su primera y única ocasión para llevar el balón a la red. En su primera ocasión, gol del griego, en un partido en que estuvo siempre luchando en solitario, pues su pareja, el goleador Jonas, ni siquiera fue convocado, otra vez lesionado. Raúl Jiménezentró al 74' aunque no gravitó gran cosa en el frente de ataque.