Del NiñoTorres al nuevo Messi integral

Mientras el ‘florendrid’ o ‘madritino’, que ya no sé cómo llamar a este subproducto fruto del paso de Mourinho por el que otrora fue el club de mejor estilo del mundo, embiste a Abel Caballero (al que está forrando de votos para las próximas elecciones, por si le hicieran falta más) el tren del fútbol pita de nuevo. Hoy toca partido grande. El Barça ganó 1-2, en el Calderón, lo que sería suficiente para dar por resuelta la eliminatoria. Al fin y al cabo, es el Barça de Messi. Pero la segunda mitad del partido del Calderón autoriza al Atlético a creer. Aquello no le dio más que para convertir el 0-2 del descanso en un 1-2, pero la superioridad queda en el recuerdo.

Caso raro el del Atlético. Aquel día pareció morir el cholismo. La primera parte fue espantosa, dejó una sensación de derrumbe. Luego, con la salida de Torres como banderín de enganche, el Atlético se rehízo y metió al Barça en serios problemas. Sólo marcó un gol, pero hizo méritos para marcar otro u otros. La clave fue la fe, el entusiasmo, el contagio colectivo. ¿Todo por Torres? Pues quizás. Jugador bandera, su presencia reavivó al estadio y al grupo, espantó el desánimo, lo activó todo. El fútbol tiene esas cosas. Torres, como siempre ocurre con los jugadores veteranos, ha mejorado la forma al avanzar la temporada y ahora es todo poderío.

El Camp Nou le espera con recelo. Al Barça le ha dado bastantes disgustos, y no sólo con el Atlético. Jugando para el Chelsea le dio el peor de todos, con un gol que le echó de la Champions. Hoy será el referente del ataque del Cholo, que le acompañará con Griezmann, Carrasco y Gaitán. El Atlético va a por dos goles, no tiene otro remedio. El Barça le espera desde su ventaja del 1-2 de ida, sin Neymar, suspendido, pero con Luis Suárez y sobre todo con Messi, que ha evolucionado de individualista prodigioso a jugador integral, con el mapa del partido en su cabeza. Él hace favorito al Barça en el ánimo de todos, pero el Atleti es imprevisible.