Garbiñe Muguruza, contra Vandeweghe y los demonios
La española busca la semifinal en la madrugada del lunes al martes (03:00, Eurosport). Roger Federer, contra el sorprendente Misha Zverev a las 09:00.
Garbiñe Muguruza ya no es un manojo de nervios. Y de su capacidad para seguir templándolos y sacudirse la presión, como hizo en 2015 para alcanzar la final de Wimbledon o el año pasado para ganar Roland Garros, dependerá en buena medida hasta dónde llegará en Melbourne. "En la pista tienes que lidiar contra los demonios, con los nervios, calmarte y meterlo dentro de alguna manera", dijo tras derrotar a la rumana Sorana Cirstea con suficiencia y alcanzar unos cuartos de final que disputará en la madrugada del lunes al martes (hacia las 03:00, Eurosport) contra Coco Vandeweghe.
La estadounidense, una jugadora potente (1,85) y 25º del mundo, limpió del camino de Muguruza a Angelique Kerber, la número uno. Por sus venas corre la sangre de la competición. Su abuelo Ernie, su tío Kiki y su tío-abuelo Mel Hutchins jugaron en la NBA y su madre, Tauna, fue nadadora olímpica. Vandeweghe domina el cara a cara con la española por 2-1. "Ahora vienen las batallas, tienes que concentrarte, ahorrar toda la energía que puedas y lo que quede, darlo todo en la pista", apunta Muguruza, que sabe que aderezando su tenis con tranquilidad mental puede aspirar a todo. A pisar por primera vez una semifinal en Melbourne.
Para las 09:00 de la mañana quedará el partido entre el renacido Roger Federer, que con 35 años aspira a su 18º Grand Slam, y el 'outsider' Misha Zverev (50º), que echó del torneo al número uno Andy Murray.